Creemos que el mejor libro publicado en 2021 ha sido “Diarios. A ratos perdidos 1 y 2”, del escritor valenciano, fallecido en 2015, Rafael Chirbes. También fue un sagaz y gran crítico literario, siempre alejado de lo comercial y en busca de la calidad literaria. Precisamente, esa ha sido su gran cualidad en toda su vida: la calidad de sus obras. Siempre arriesgando, siempre buscando la perfección y siempre inseguro en todo lo que escribía, lo que denota su modestia y su bonhomía. La primera entrega de sus diarios que nos ha llegado gracias a su albacea literario Juan Manuel Ruiz Casado es sencillamente antológica. En ella, no se muestra en absoluto pacato y sí hiriente con algunos escritores muy sobrevalorados por nuestros críticos y lectores. A éstos se les puede perdonar, a aquéllos no. Son páginas llenas de vida, a menudo descarnadas, y de literatura, donde nos cuenta pasajes muy íntimos de su vida sin morderse la lengua. Un libro imprescindible y totalmente antológico. Ya estamos esperando la segunda entrega de sus diarios. ¡Qué no tarden mucho los responsables de Anagrama, por favor!
En segunda posición, se encuentra la nueva entrega del Cuarteto de la Guerra de Xavier Güell, “Nadie logrará conocerse”. En el libro, se narra la vida de Richard Strauss, que tuvo una existencia llena de vicisitudes y sinsabores en sus últimos años por culpa de su cercanía con los jerarcas nazis. En la novela, queda claro el porqué de su pasividad ante el nazismo, quizá su elevada edad, tenía 70 años cuando ganó las elecciones Adolf Hitler, sea una de esas causas, pero hubo más cómo podrán comprobar con la lectura del libro. Güell mezcla en su novela varios géneros, hasta tiene una cierta estructura teatral su novela. La obra tiene un ritmo muy musical, gracias a la puntuación que utiliza; así el lector se podrá deslizar por las páginas de su novela como un oyente que escucha una sinfonía u ópera. Dejándose llevar por su musicalidad, por la trama de la biografía novelada del que quizá sea el gran compositor del siglo XX. Una gozada total, donde la música y la literatura confluyen en el disfrute de una lectura que se diferencia de lo que solemos leer. “Ya no hay experimentación en nuestra literatura”, se nos quejó el autor barcelonés. No la hay, es verdad, salvo en sus libros y en los que hemos seleccionado este año.
“Arde este libro”, de Fernando Marías, se alza con el tercer lugar de nuestra clasificación. En él, el autor narra parte de su biografía y lo hace en primera persona y con toda la sinceridad de sus recuerdos, que lleva pegados en su alma. Es un recorrido de unos años de formación donde encontró un amor que tuvo bastante de destructivo, pero que mereció la pena vivir. En el libro recorre aquel Madrid de la Movida con toda su experiencia de lo vivido. El libro puede ser doloroso leerlo, pero intuyo que para Fernando no lo ha sido, más bien ha debido ser sanador. El resultado es un libro desgarrador donde nadie es quien soñó que sería. La cuarta posición es para Inma Chacón, autora de “Los silencios de Hugo”. Una novela que comparte varias características con el anterior. Ya que también está basada en hechos reales, y el marco cronológico es prácticamente el mismo. Trata sobre un amigo de la escritora extremeña que perdió la vida por causa del SIDA, una pandemia que afectó a millones de seres humanos en aquellas dos últimas décadas de final del siglo pasado. Nos sigue sorprendiendo la sencillez con la que la autora narra la historia, utilizando una prosa ágil y dinámica que nos atrapa desde el primer momento por la veracidad con la que cuenta unos acontecimientos demasiado trágicos, pero fidedignos.
La quinta plaza es para “Las gratitudes”, de la autora francesa Delphine de Vigan. Tuvimos la oportunidad de conocer a la escritora hace dos años en el Instituto Francés, ya la seguíamos desde aquella portentosa “Nada se opone a la noche” que nos deslumbró. Su nueva novela está escrita con un estilo contenido, casi austero, una narración a dos voces que nos habla de la memoria, el pasado, el envejecimiento, la bondad y, sobre todo, la gratitud hacia aquellos que fueron importantes en nuestras vidas. Son las respectivas gratitudes las que unen a los tres inolvidables personajes cuyas historias se entrelazan en esta conmovedora y deslumbrante novela. La sexta posición es para “Los últimos deseos”, de Andrés Ruiz Tafur. Una colección de textos compuestos por artilugios que caminan por una senda abierta entre el periodismo y el cuento, que se han dado en llamar articuentos, y cuyo mayor representante en España, a mi entender, es el maestro Juan José Millás, que es posible que sea el creador de este género; aunque Ortiz Tafur no le anda a la zaga en cuanto a excelencia. Ortiz Tafur, mira, coge un hilo, lo enrolla en un ovillo con el que hace un traje de letras -en el que cabe un mundo-, y con el que se abriga como escritor llevándonos a los lectores al asombro de lo cotidiano, a la grandeza de las pequeñas cosas, a la extrañeza, en definitiva, a lo simple y universal.
La séptima posición es para “La llama inmortal de Stephen Crane”, de Paul Auster, un recorrido fascinante por la figura del escritor Stephen Crane y por los años en los que Estados Unidos pasó de ser el país de Billy el Niño a convertirse en la América de Rockefeller. Dueño de una vida tan fugaz como intensa, Stephen Crane es una figura única en la literatura universal. Empujado siempre por la falta de dinero, malvivió durante el último tercio del siglo XIX escribiendo artículos, novelas, relatos y poesía, trabajó como corresponsal de guerra y defendió los derechos de los más desfavorecidos en una época de conflictos laborales y sociales. En la novela, Paul Auster pone su habilidad indiscutible como escritor al servicio de una apasionante biografía que se lee como un western literario. En octava posición se encuentra “Un señor elegante”, de escritor gallego Suso de Toro, una increíble novela de no ficción, donde el autor nos cuenta la sorprendente historia de la familia Baltar y, de paso, revisa el pasado de la resistencia antifranquista durante la dictadura franquista. Suso de Toro es un escritor inclasificable que huye de las etiquetas de ahí que sus obras siempre sean muy originales y atractivas. En su última obra, ha hecho un canto a la resistencia y a la vida ética, cosas que se han perdido en estos últimos tiempos.
La novela posición es para “Alguien como tú”, de Nick Hornby, el escritor británico supo describir una época efervescente de la escena musical inglesa para, posteriormente, evolucionar hacia una literatura más intimista y costumbrista, no exenta de humor. En su nueva novela cuenta una extraña relación de amor entre dos personas radicalmente distintas y que tienen una diferencia de años considerable. Tanto Lucy, mujer blanca, 42 años, como Joseph, hombre negro, 22 años, vienen de entornos culturales tan diferentes que el lector se pregunta si una relación así puede funcionar. Cosas más difíciles se han visto, pero no tan bien contada como lo hace Hornby que nos regala una novela conmovedora y, como todas las suyas, repletas del mejor humor británico. Finaliza nuestro listado con la última y reciente novela de Antonio Soler, uno de los grandes narradores de nuestro país. “Sacramento” está basado en un suceso real, ocultado desde los tiempos más oscuros, años 50, de la dictadura que padecimos durante 40 años. Eran años de un secretismo exacerbante y lacerante. Soler ha sabido plasmar esa época tremendista con su fina pluma de manera eficaz y ha rascado en la personalidad de los protagonistas para componer un fiel mosaico de una época tan oscura como inquietante.
CLASIFICACIÓN
- “Diarios. A ratos perdidos 1 y 2”, de Rafael Chirbes
- “Nadie logrará conocerse”, de Xavier Güell
- “Arde este libro”, de Fernando Marías
- “Los silencios de Hugo”, de Inma Chacón
- “Las gratitudes”, de Delphine de Vigan
- “Los últimos deseos”, de Andrés Ortíz Tafur
- “La llama inmortal de Stephen Crane”, de Paul Auster
- “Un señor elegante”, de Suso de Toro
- “Alguien como tú”, de Nick Hornby
- “Sacramento”, de Antonio Soler
Si (
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