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“Para escribir a cuatro manos con alguien debes estar muy en sintonía con esa persona”

30/05/2016@07:09:05

Félix J. Palma y María Fortea han unido sus fuerzas en "El amor no es nada del otro mundo" para escribir una interesantísima novela sobre los universos paralelos, donde los protagonistas viven un increíble triángulo amoroso rodeados de personajes que nos harán reflexionar con mucho humor sobre la idealización del amor y la felicidad en los tiempos de Facebook.

Las dos booktubers más influyentes de España unidas para escribir una novela


"Besos entre líneas" es el resultado de la unión de dos de las 'booktubers' más influyentes de nuestro país. El éxito de las autoras en Internet es más que asombroso, Esmeralda Verdú tiene más de 100.000 suscriptores en su canal de Youtube y May R. Ayamonte, cuenta con más de 59.000 en el suyo.

Destrucción en 140 caracteres, eso es lo que hace y consigue Eric Jarosinski en su último libro compendio de tuits publicado por Editorial Anagrama: "Nein. Un manifiesto".

Escrito e ilustrado por Ana Polegre


Suena el teléfono.
—¿Puedes estar en media hora en la otra punta de la provincia para una guardia?
Esa es la enfermera en apuros, ella puede ser cualquier enfermero de este país. La Enfermera en apuros es la que te cura la herida justo antes de que el cirujano quiera destaparla para valorarla.

La joven escocesa Estelle Maskame empezó a escribir con 13 años, cautivó a más de 4 millones de lectores en Wattpad y lidera la lista de libros juveniles más vendidos en España

Estelle Maskame tenía 13 años cuando empezó a escribir la primera entrega de YOU. Disfrutaba leyendo porque le permitía trasladarse a lugares imaginarios y alejarse de su ciudad, Peterhead (Escocia), por eso decidió situar su novela en Los Ángeles, aquella ciudad excitante de las celebrities que sólo había visto en las películas, pero que ha logrado describir con todo tipo de detalles.

Los cambios que ha experimentado la televisión, en los últimos quince años, no tienen precedentes. Atrás queda la escasa oferta de canales, las peleas por el mando a distancia, la resignación ante los cortes publicitarios, el zapping y el drama de la contraprogramación. Sin duda asistimos a una etapa fascinante en la que el espectador, además de seguir su programa favorito, puede votar a un concursante, participar en la retransmisión de una serie o comentar lo que dicen los contertulios de una mesa de debate. Decimos que vemos la tele, pero tenemos la mirada clavada en el móvil y nuestra atención no se centra, exclusivamente, en su pantalla.