Se publica "Mi vida con Alberti. Para algo llegaste, Altair", de María Asunción Mateo, un libro de memorias esperado, “un libro de amor”, como lo define su autora, escrito más de veinte años después de la muerte del poeta gaditano y en el que, además de repasar lo que fue su vida juntos, su primer encuentro, sus citas en el piso destartalado del escritor en Madrid, su caminar de la mano, ella siempre un paso por detrás del marinero en tierra, ajusta cuentas con quienes, escribe, orquestaron una campaña tras la muerte del autor en 1999 “que me fustigaba, que se saltaba todos los derechos que deben proteger a una ciudadana, que ponía en duda desde mi cordura, mi honor, mi valía intelectual, el amor hacia mi marido, sus sentimientos de él hacia mí y —lo más grave e indecente— su salud mental desde el momento en que se casó conmigo…” y de cuya boda se publican por primera vez las fotografías, celosamente guardadas por Mateo durante años, extraviadas en un aeropuerto y devueltas a su dueña. El destino, seguro.