El año 1907 comenzó con la matanza de Río Blanco (México), donde fueron masacrados centenares de obreros con sus mujeres y niños por reclamar condiciones humanas en las fábricas, y terminó con la matanza de la escuela Santa María de Iquique (Chile), con centenares (algunos hablan de miles) de obreros y familiares muertos por razones parecidas.