Por Javier Velasco Oliaga
Con Hablaré cuando esté muerto Anna Jansson ha conseguido un éxito de ventas a nivel mundial. La novela negra sueca lleva unos años en la cresta de la ola. Con esta, su primera obra traducida al castellano, dota al género de una profundidad y rigurosidad que le da más consistencia y que permanecerá por mucho tiempo en las librerías.