Lumen, Barcelona, 2019
La palabra, bajo la advocación de esta autora sutil y trascendente (esto es, pensadora con delicadeza acerca del todo, de la realidad o realidades de todo) descansa, sosiega y se hace un interlocutor entrañable. Así es la dúctil poesía: “Eres bella –le digo a la vida-,/ imposible imaginarte más exuberante,/ ni más ranil, ni más semillera”.