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Azucena del Valle

02/02/2024@06:36:00
Azucena del Valle saca su parte sentimental en ¡I'M LATE!, ¡I'M LATE!. Parece que su corazón late, late, demasiado deprisa y su mente también. Muchas veces hacemos cosas que no nos gustan o no nos interesan solo por satisfacer a otras personas. Y eso que sus amigos Alberto y José le dan buenos consejos a los que no hace caso. Puri tendría que pasear más y descansar de su agobio. "El corazón tiene razones que la razón ignora", ya lo dijo Blaise Pascal cuando le cayó una manzana en la cabeza cuando se estaba echando la siesta. ¡Oye Puri, ese no fue Pascal sino Newton! ¡Y quien te dice a ti que Pascal no se echaba la siesta! ¡Más siestas y menos trabajar!

Azucena del Valle se nos ha vuelto canapera. En "Remember Me" se sincera y nos dice que le gusta que la inviten para poder comer el jamón que no puede comer en su casa. Otras canaperas, llevan regalos a las organizadoras para que las sigan invitando a eventos. Y todo para hablar de la imagen que nosotros tenemos de nosotros mismos. Lo peor sería volverse como la madre de Blancanieves que termina por romper el espejo en que se miraba. Mejor ser prudentes y vestir como queramos y no como esas góticas, más que la catedral de León, que dieron el cante ante el hombre más poderoso del mundo.

En esta ocasión, Azucena del Valle nos habla en ¡366 oportunidades! del mal fario de los años bisiestos, que suelen coincidir con los Juegos Olímpicos. Como bien dice la autora abulense, es un día más de oportunidades. Mi última tía nació un 29 de febrero, evidentemente de año bisiesto, y lo celebrábamos un día después porque decía que hacerlo antes traía mala suerte y que cada santo o cumpleaños tiene su novena. Murió la tía Teófila con 23 años y llegó un día en que sus hijas y sobrinos teníamos más años que ella porque ella solo contabilizaban los que cumplía el 29 de febrero. Estuvo joven toda su vida hasta que el alzheimer acabó con ella. ¡Hasta los más grandes tienen su final, pero el suyo fue feliz! Lo mismo deseamos a nuestra Azu y a todos sus lectores, que son legión, para este año.

El pobre de Papa Noel se pasa la Nochebuena repartiendo regalos a todas las criaturas del mundo. La pobre de Azucena del Valle la pasa obsequiando a sus amigos y familiares sus conocidas galletas que cocina por las noches, para que no le salga la factura de la luz tan abultada como al orondo Noel. Hoy nos cuenta en "¿Pavo o palurda rellena?" cómo va a ser su cena de Navidad, donde sienta todos los años un pobre a su mesa. Seguro que le ofrece pavo para comer porque para palurda rellena ya está ella, que para eso es de Ávila.

Para unos, celebrar su cumpleaños es algo triste, para otros alegre. Nos lo cuenta Azucena del Valle en ¡Cumpleaños feliz! Como dice un amigo mío, ¿quién pudiera celebrar siempre los 25 años? Ya nos gustaría, ahora tenemos más cumpleaños por detrás que por delante. Seguiremos el consejo de la escritora abulense y nos aplicaremos la doctrina Simeone.

Durante el mes de noviembre se viene celebrando en la Biblioteca Regional Joaquín Leguina las VII Jornadas Madrileñas de Novela histórica que dirige Carolina Molina. Este jueves le ha llegado el turno a la mesa "Novela histórica, ¿para qué?", con la presencia de Luis Zueco, David Yagüe y Javier Velasco Oliaga. Azucena del Valle estuvo allí con sus amigas la Puri y la Vani y nos lo cuenta en exclusiva.

Vuelve Azucena del Valle y sus amigas la Puri y la Vani con más energía que nunca. Están viviendo los acontecimientos de la calle Ferraz en primera persona con el pito en la mano. Mientras, la pasma, que todavía no ha sido capaz de encontrar al pistolero que le pegó un tiro a Alejo Vidal-Quadras, va a sacudir estopa a jóvenes provocadores y personas de la tercera edad que se manifiestan pacíficamente. Cuando en Europa dicen que la policía española está entre las cinco más corruptas del continente -y no es el hiper-, a nivel de Rumanía, Holanda, Grecia y Bélgica, todavía no nos lo creemos, pero vamos camino de ello. Nos cuenta estos acontecimientos la autora abulense en "¡Puto cubo amarillo!"

Azucena del Valle y la Puri se ponen sentimentales recordando al amigo que ha partido en su último viaje en "Réquiem por un hombre bueno". Evidentemente, tenía un gusto más exquisito que estas dos malas pécoras. En mi opinión, Irène Néminovsky me parece una autora sobrevalorada, es verdad que tuvo mala vida y un peor final, pero su libro "El baile" es de lo peor de su producción. Puri no lo cree así, pero así es la vida. Lo recuerdos son los recuerdos y el homenaje que hacen de su amigo hace que el corazón se te encoja. Juzguen ustedes.

Se equivoca la Vani cuando no sabe si las golondrinas regresan a su nido. Regresan siempre, lo malo sería que ese nido ya estuviese vacío. Ese es el riesgo de la inmigración, ahora tan de moda, aunque el visionario Bécquer ya lo vio venir con sus oscuras golondrinas. ¿Y si ellas llegasen con un tatuaje impreso en cierta parte del ala o cómo los marineros que se tatuaban en el pecho un nombre de mujer? Nuestros marinos no son rubios sino morenos y, hasta hace poco, de escasa estatura. Azucena del Valle nos cuenta en ¿Volverán las golondrinas?, la relación entre el tatuaje y la migración. Cien por cien: diezmil, Puri.

Azucena del Valle recapitula en ¡Que te den, 2023! lo que ha sido para ella y sus amigas este año que se acaba. Cuenta también cuáles son su propósitos, no de enmienda, para el año que viene. Todos muy loables. Y nos cuenta lo que ha supuesto para ella la lectura de "Los contemplativos", de Pablo d´Ors, un escritor especialista en la meditación y el crecimiento interior. A mí, eso me viene chico porque mi crecimiento, este año, ha sido exterior, sobre todo por la barriga. En cualquier caso, Feliz Año Nuevo y Próspero... Mérimée.

Azucena del Valle y sus amigas la Puri y la Vani conocen a personas de lo más extrañas. Nos lo cuenta en ¡Cómo perder el curro sin despeinarte! Hay que ser ingenuo o tonto para jugarse los garbanzos de forma tan absurda. Desde pequeño, me decía mi madre: donde tengas la olla no metas la p... ¡Qué razón tenía! Nunca la hice caso y así me ha ido.

Hubo un tiempo en que una ardilla podría recorrer la península Ibérica de árbol en árbol sin tocar el suelo. Hoy puede un turista recorrer el mismo camino de vinoteca en vinoteca. Ahora se llama a eso gastro-experiencia o eno-experiencia. Azucena del Valle nos cuenta en ¡España de vid en vid! cómo recorrió nuestra tierra de bodega en bodega. Lo cuenta su amiga la Puri que en cuestión de experiencias gastronómicas y vitivinícolas sabe de aquí a los Pirineos, y más allá.

Decían en mi pueblo: "mujer refranera, mujer puñetera" y lo mismo vale para el hombre. Azucena del Valle nos ha salido en su nuevo artículo ¡Me gusta la fruta! refranera dicharachera y, por supuesto, puñetera. Parece que ahora nos tiene que gustar la fruta a la fuerza; yo de niño comía poca, sólo la que robabamos de los árboles por la noche, si eran melones los llamábamos luneros, pero éramos más de rebanada de pan mojada en vino y azúcar con una onza de chocolate. La Puri y la Vani asemejan a nuestros políticos con la fruta. Se ha puesto de moda eso del pin de la sandía, pero la sandía es pura agua, como nuestros exquisitos políticos que se nos escapan de la mano.

"El relato es más exigente que la novela y en España no tiene el predicamento que en el mundo americano"
El cuento, extrañamente, no es muy popular en España. Lo contrario sucede en Latinoamérica y en el mundo anglosajón. El escritor gijonés Ricardo Menéndez Salmón acaba de presentar una recopilación personal de relatos "Los muebles del mundo" a la prensa. Hasta el Hotel de las Letras se acercó Azucena del Valle para hablar con él. El resultado aquí lo tienen.

Y Azucena del Valle cogió su fusil en ¡Dispara lejos! donde se vuelve una superheroína y analiza las dependencias emocionales de los jóvenes, y no tan pipiolos, de hoy en día. Lo de autorrealizarse se lo dejamos a los mecánicos del amor y, también, del humor. Azu siempre se lo echa a la vida y a las situaciones más estrambóticas de sus dos protagonistas, la Vani y la Puri. ¡Con los sentimientos hemos topado, amigo Willy!