27/11/2018@08:48:27
La protagonista de la novela, Karina, no es una santa ni aspira a serlo, aunque en la historia de su vida podemos encontrar ciertos rasgos de paralelismo con una de las acepciones de la palabra pasión, aquella con la que denominamos los episodios evangélicos que narran el sufrimiento de Jesucristo, entre la última cena y su crucifixión y muerte.