«Los hombres siempre están entretenidos en querellas y matanzas. El odio es mucho más común que la fraternidad y la fraternidad es tan frágil como una rama seca». Por tanto, si el sueño de Ares es una pesadilla para la humanidad, a lo largo del siglo XX, el dios de la guerra no ha dejado de hacer realidad sus fantasías más crueles. Rafael Narbona nos ofrece en estos quince relatos un panorama de violencia y destrucción en el que toman la voz tanto víctimas como verdugos.
El sueño de Ares nos traslada a diversos conflictos armados de la segunda mitad del siglo XIX y del siglo XX, además de retratar otras situaciones violentas no bélicas como son el crimen urbano, la mafia o las reyertas entre los hooligans, que también muestran el triunfo de la desolación aunque sea a menor escala. Así, Rafael Narbona nos traslada a la guerra civil española, la caída de Berlín o la defensa de Stalingrado, los cuales serán los escenarios de algunas de estas narraciones.
Algunas de las historias están centradas, para poner algún ejemplo, en pelotones de fusilamiento en la Andalucía de la guerra civil, ancianos de las milicias alemanas que defendían Berlín, brigadistas internacionales, independentistas irlandeses o judíos que intentaban escapar de las SS. La mayoría de ellas están relatadas en primera persona, lo que logra transmitir la angustia y la pasión de los personajes con gran precisión, además de la casi omnipresente sensación de miedo y sus diversas formas de aceptar la muerte.
Además, en alguna de estas historias se asoman personajes como Poe, García Lorca o Jack el destripador, a alguno de los cuales
Rafael Narbona llega a abordar también en primera persona con excelentes resultados. En relación a estas figuras de la historia yo destacaría como la mejor recreación esa excelente carta que pone en boca del coronel Shaw, primer oficial que comandó un regimiento de hombres negros en la guerra de secesión estadounidense. Dicha carta la dictó en los momentos previos al aniquilamiento de su unidad.
En definitiva,
El sueño de Ares consigue reflejar el porqué de toda esta destrucción con la que el dios de la guerra sueña y de la que los hombres aún no hemos conseguido despertar ni escapar.
Puedes comprar el libro en: