Mateo Alemán nació en Sevilla en 1547. Se graduó de bachiller en Artes y Teología (1564) en la Universidad de Maese Rodrigo. Después estudió Medicina en Salamanca y Alcalá, aunque no figura en los libros como licenciado. De vuelta en Sevilla, ejerció como recaudador de impuestos y contador mientras se dedicaba a diversos negocios. Encarcelado por deudas en 1580, pasó en la cárcel de Sevilla dos años y medio. En 1593 viaja a Almadén como juez visitador para inspeccionar las minas de mercurio, experiencia de la que se conserva su Informe secreto (La obra completa, vol. 1).
De vuelta a la corte traduce varias Odas de Horacio y redacta un prólogo para los Proverbios morales de Alonso de Barros (La obra completa, vol. 1). También escribe la Primera parte de Guzmán de Alfarache, terminada a fines de 1597 (La obra completa, vol. 3). Encarcelado de nuevo por deudas en 1602, publica dos años más tarde su Vida de san Antonio de Padua (La obra completa, vol. 2) y en Lisboa, la Segunda parte del Guzmán de Alfarache (La obra completa, vol. 3). En 1608 obtiene licencia para pasar a México, ciudad donde entra a servir al arzobispo fray García Guerra. En 1609 publica una Ortografía castellana (La obra completa, vol. 1) que defendía la tendencia fonetista frente a la etimologista. En 1613 escribe los Sucesos de don fray García Guerra (La obra completa, vol. 1), obra que incluye la Oración fúnebre en memoria del prelado (La obra completa, vol. 3). Un año después muere en Chalco, México, en la más absoluta pobreza.
En el primer volumen bajo el título de
Obra varia se reúnen, por primera vez, todos los textos conservados del autor sevillano, salvo la Vida de san Antonio de Padua y el Guzmán de Alfarache, obras de mayor empeño. Los primeros escritos lo sitúan ya en su entorno ideológico, evidencian una sólida formación clásica y avanzan algunos de sus temas sociales recurrentes, como la mendicidad y la amistad, propios de los intelectuales que forman el restringido grupo al que pertenece.
El segundo volumen está dedicado a san Antonio de Padua a raíz del “milagro” que el año de 1591, le salva la vida en Cartagena de Levante, Mateo Alemán hace voto de componer, como acción de gracias, la historia de la
Vida y milagros de san Antonio de Padua y cumple su promesa unos trece años más tarde, el mismo año de la publicación de la Segunda parte de la vida de Guzmán de Alfarache (1604). Pero su hagiografía, si bien se centra en el personaje del ilustre taumaturgo franciscano, debelador de herejías del siglo XIII, es ante todo una ocasión para el escritor hispalense de abordar muchos de los problemas —religiosos, teológicos, económicos, sociales, familiares, etc.— de su tiempo.
El tercer volumen está dedicado en exclusiva a "
El Guzmán de Alfarache" (1599 y 1604) que fue un éxito editorial de primera magnitud, un best-seller clamoroso como pocas obras de la época áurea. De la noche a la mañana, Alemán, hasta entonces un escritor casi desconocido, se había hecho con el mayor público lector en la historia editorial española. Entre burlas, ironías y guiños, con una lengua muy cercana a la vida del día a día, en sus páginas puso de manifiesto verdades incon-testables, al tiempo que abría las puertas de la novela realista moderna. A partir de la aparición del Guzmán las cosas iban a cambiar radicalmente en el mundo de las letras.
Puede comprar la obra completa en: