Orbaneja es un ingeniero vallisoletano que se ha dedicado al mundo empresarial desde diferentes ramas. Ha sido profesor en varias universidades y conoce perfectamente ese mundo. En la actualidad se dedica a escribir y uno de sus temas favoritos es la Iglesia Católica, sobre la que ha escrito varios libros. Es una persona extremadamente sincera, culta y modesta. Sus últimos libros le han convertido en un Pepito Grillo de nuestra historia olvidada y, también, de la actualidad. Con pluma sencilla y audaz ha diseccionado la historia y los errores de España y ahora le toca aportar sus soluciones. En el texto proporciona toda clase de recetas para convertir a nuestro país es uno mucho más moderno, eficaz y democrático. La lectura del libro aportará al lector una visión lúcida y real del país en que vivimos.
Analice a España someramente en su pasado.
Falta de preparación humanista y científica y sometimiento a las directrices de la Iglesia.
Analice los principales problemas de España en el presente.
Debido a la falta de preparación somos una colonia económica de otros países.
Las soluciones son difíciles y complicadas. ¿Cuáles atajaría usted como las tres primeras?
Nada es difícil si se quieren solucionar las cosas. Lo primero es una enseñanza, a todos los niveles, rigurosa y eficaz; una justicia rápida, creíble y justa (valga la redundancia) y la tercera vía es implantar una auténtica democracia.
¿Son los políticos los causantes del desbarajuste español?
No podemos tener buenos políticos sin una buena enseñanza. Su defecto actual es el ansia de poder sin importarles el bienestar de los españoles.
¿Son los banqueros?
También tienen buena culpa por su desmedida ambición.
¿Es la Iglesia Católica?
Desde luego, es la principal causante de nuestro atraso al estar en sus manos gran parte de la enseñanza.
¿Qué le parece que una política española como Dolores de Cospedal gane unos 240.000 euros al año, y que no sea la única? Ahí están Leire Pajín o Rosa Díez.
Me parece una falta absoluta de decencia, de insolidaridad y de justicia.
¿Qué opinión le merece el estado de la Justicia en España?
Deplorable.
En su libro acusa a España de país cainita, ¿a qué hechos más significativos se refiere?
A nuestras más que frecuentes guerras civiles y a la constante crispación política y religiosa que sufrimos.
¿Cree que esa cualidad nos ha convertido en un pueblo de perdedores o como dice en el libro, de borregos?
Naturalmente, se está tratando de implantar el "pensamiento único", como ya ocurrió en varias ocasiones en nuestra historia. Espero que no lo consigan.
¿La Iglesia Católica ha coadyuvado en este tema?
Totalmente, con sus enseñanzas y su intransigencia.
¿Se muestra firmemente partidario del laicismo o se definiría anti clerical?
Soy partidario del laicismo, que nunca puede ser "agresivo" como dice el Papa, y no me siento anticlerical, pero con sus descalificaciones, mentiras y difamaciones le empujan a uno hacia el anticlericalismo, se lo están ganando a pulso.
¿Cree que quedan estadistas entre los políticos actuales en España?
Ninguno, todos piensan en las próximas elecciones, nunca en la próximas generaciones.
En el libro se muestra seguidor de Azaña, pero su comportamiento durante la Guerra Civil no fue muy ético abandonando Madrid a manos de una Junta de Defensa irracional y sanguinaria. ¿Qué cree que debería haber hecho don Manuel en esa situación?
Fue un intelectual de primera magnitud y por eso se vio desbordado por la masa revolucionaria. Entonces era Presidente de la República, no Jefe del gobierno. Y no fue una huida, Madrid estaba siendo bombardeado continuamente y los organismos estatales se tuvieron que trasladar a Valencia, con el fin de trabajar en mejores condiciones.
¿A qué cree que es debida la censura de los medios de comunicación por parte de la iglesia y de los poderes políticos y económicos?
Porque tienen miedo a que se conozca la verdad. No deben tener la conciencia muy tranquila.
¿Está la administración del Estado obsoleta? ¿Cómo la cambiaría?
Mediante un estudio racional aplicando las modernas técnicas de gestión y organización.
¿Haría una modificación de los distritos electorales para acercar la democracia al pueblo o iría a una modificación más amplía de la Constitución?
Las dos cosas son necesarias. Distritos electorales conformes con su contexto socio-económico. Una nueva Constitución que elimine los muchos errores de la actual y que recoja las nuevas necesidades, experiencias y situaciones.
¿Cuáles serían sus propuestas para una modificación sustancial de la economía española?
Una economía basada en el conocimiento, tanto en el campo como en la industria y los servicios.
¿En quién deberíamos fijarnos?
En los países desarrollados, pero principalmente en los países escandinavos, en Alemania y en Francia.
¿Podría explicarnos qué es un presupuesto participativo, que tan buen resultado ha dado en Brasil?
Los explico en mi libro, es un presupuesto en el que participa el pueblo con sus objeciones, ideas y deseos y, una vez aprobado, persigue su realización.
El libro está lleno de citas interesantes y curiosas, pero llaman la atención las muchas que utiliza de Quevedo, ¿tendríamos que volver a nuestros orígenes para afrontar el futuro con éxito?
No es necesario, pero hay que aprender del pasado para evitar los errores. Citar a Quevedo es inevitable, fue un genio y amaba a España, por eso criticaba.
La enseñanza, la justicia, la educación, la cultura,... ¿Qué nos falta a los españoles para convertirnos en un país del futuro?
Precisamente eso: enseñanza, justicia, formación, cultura, civismo y, sobre todo, trabajo constante y duro; lo único que levanta a un país es el trabajo en todas sus variantes.
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