El protagonista del relato es Agustín Cañizares, un ingeniero de Gerona, descendiente ilegítimo de una influyente familia catalana. A través de sus recuerdos, con varias analepsis, revela la formación del imperio creado por su abuelo durante la postguerra y aumentado al amparo de la dictadura franquista y, evidentemente, cuantos personajes rodean a esa familia durante tres generaciones. La novela presenta un gran pulso narrativo que se va acelerando hasta llegar a la actualidad. La trama discurre en tres agitados y trepidantes días del 2021.

Gastón Segura nos dice que “esta obra se adentra en las intimidades de una familia, donde lo particular, por supuesto, se entrelaza con la historia general del país”, y agrega que “como toda novela; es una exploración, una desvelación de las circunstancias que definen a una sociedad; en este caso, la catalana”. Desde este entrelazarse, la novela invita a los lectores a reflexionar y a comprender un hecho político: el Procés, del que no solo Cataluña sino también el resto de España somos, más que espectadores, “víctimas”.

Tanto es así que para el autor de Saga nostra “el Procés ha puesto al resto de España en una situación particularmente tensa, cuya conclusión más evidente es que, desgraciadamente, el resto de los españoles miremos a los catalanes con cierto encono y hartazgo. Lo grave es que, según las encuestas, en el momento más álgido, solo el 30% de la población de Cataluña estuvo a favor de ese proceso”.

“La novela está escrita así porque lo quiso el protagonista”

La narrativa de Saga Nostra se caracteriza por su estilo envolvente y poético, con un regusto a la literatura de Camilo José Cela. Segura ha sido elogiado por su habilidad para crear mundos vívidos y personajes complejos y esta nueva obra no es una excepción. Los lectores se encontrarán inmersos en un viaje literario que los llevará a través de diferentes épocas y lugares, explorando las conexiones entre el pasado y el presente.

“La novela está escrita así porque lo quiso su protagonista, Agustín Cañizares; mi misión, como novelista, es no contradecirlo. Veamos; su escritura no ha sido sino un escucharlo, un dejarme llevar por él. Pues opino que el novelista no debe ser más que un médium; de modo que el personaje es quien debe contar la novela, no yo”, desmenuza el escritor y añade: “los novelistas no debemos imponer nada en la historia que se relata, solo somos quienes llevan al papel parte de una vida o de varias vidas. Por tanto, el arte de novelar, cuando lo hay, es disponer de la capacidad, con el mejor dominio del vocabulario y de unos sólidos trucos técnicos, para plasmar un trozo de vida. Y naturalmente, tener la humildad para escuchar a los protagonistas. En realidad, los novelistas no somos más que servidores de los personajes”.

El escritor es un servidor de los personajes

El autor también compartió con nosotros anécdotas sobre el proceso de escritura de Saga nostra, revelando que el origen de la novela no fue sino una reacción ante el desdichado suceso de la niña de Canet de Mar. “Cada lugar, cada circunstancia, desvela su propia historia o una multitud de historias” y “aquel desgraciado incidente, me alumbró a Agustín Cañizares, el protagonista de esta novela, que aunque no tenga nada que ver con lo acontecido en Canet de Mar”, nos descubre cuales son las causas para que aquello sucediese. “En esta novela —señala Gastón Segura— el protagonista está obsesionado con su bastardía. Agustín quiere que le reconozcan, no tanto legalmente, como que le hablen, que lo estimen sus hermanastros. No quiere su dinero, ni tampoco un reconocimiento legal, sino la simple y humana sensación de ser tratado como un miembro, aunque fuera lejano, de la familia que acapara todo el relato”. Esta situación le dio pie a indagar sobre el problema del charnego en Cataluña, pues Agustín, el protagonista de Saga nostra, además de bastardo, es hijo de una empleada almeriense de esta poderosa familia catalana. De modo que, con Saga nostra, Gastón Segura describe la forma de proceder de la burguesía catalana, y a través de ella, “las claves de la sociedad catalana en la actualidad”.

Gastón Segura, con Saga nostra, demuestra, una vez más, su capacidad para entrelazar historias y explorar la condición humana por medio de un relato, que ofrece a los lectores una experiencia no solo comprensiva de una situación sino su correlato inmediato: una meditación sobre una circunstancia social; y en el caso de Saga nostra, donde estamos involucrados todos los españoles. En conclusión; su compromiso por contar historias que resuenen en el corazón de los lectores.