- Vani, ¡vengo que echo las muelas de la misma indignación que me arrebata!
- Pues sí que tienes tú las emociones desbordadas últimamente ¿qué te ha pasado ahora?
- Que he hablado con Mari Mari Pilón y estaba avergonzada por no haber sido capaz de plantar cara a un par de abusones, grandes como armarios de tres cuerpos, en el Banco Trágalas 2, Sucursal de "Así te jodas" número 13.
- Desembucha tía, que me tienes en ascuas
- Como sabes, la situación administrativa, por no entrar en más detalles, de este país está hecha unos zorros y tienes que pedir cita lo mismo para renovar el DNI que para pagar un impuesto o que se te hayan hinchado las mismas amígdalas o la próstata, y no digamos en para que te atiendan en la banca motorizada, que si eres de la generación del bolígrafo no puedes ni disponer de tu santa pensión porque no te hace caso ni el puto cajero. El caso es que mi amiga estaba haciendo cola pacíficamente y la señora que iba delante no entendía ni un pijo de la jerga que la soltaba el chupatintas de turno, un suponer. Problemas del emisor tanto como del receptor, y no digamos de la codificación del mensaje.
- Tía, si no conoces la nuevo jeringonza es difícil entender dónde tienes que poner el sello mayormente, aunque tengas la cartilla delante, un suponer.
- Pues eso Vani, que la pobre señora no entendía nada y volvía a preguntar una y otra vez hasta que la concurrencia de la cola empezó a impacientarse y meterse con ella en vez de con el gestor de la entidad. A un animal se le unió otro sin que nadie saliera en defensa de la susodicha que, en ningún momento, perdió ni la compostura ni la dignidad.
- Pero Puri, tu amiga es pequeña pero matona, ¡menuda leche tiene cuando contempla delante una injusticia! ¿Por qué se calló y no los puso en su sitio?
- Pues ahí voy, que estaba a punto de saltar si no hubiera sido por el contenido de su marido que la puso firme con eso de ¡tú no te metas, que no va contigo! Y Mari Mari Pilón se mordió la lengua intentando acallar su conciencia y al salir de la oficina se acercó a la viejecita para pedirle perdón por haber sido una cobarde y no intervenir. Todavía se siente avergonzada y culpable por no haberles soltado dos frescas y ponerles en su sitio.
- ¡Pobre! Si los planta cara seguro que la bronca se la hubiera llevado ella, ya sabes cómo se unen los cabrones y se envalentonan delante de los que suponen más débiles.
- Eso es porque la responsabilidad en grupo se diluye. Seguro que la mayoría de las atrocidades que se cometen en manada nunca hubieran sido llevadas a cabo por individuos en solitario.
- ¡Cien por cien!, Se ha escrito mucho sobre el comportamiento de las masas, aunque en el banco esta mañana solo vociferaran dos iracundos cabrones. Si hubieran sido diez, seguro que también se habrían unido al abucheo, y no precisamente protestando contra la entidad por tener poco personal, sino arremetiendo a la desamparada ciudadana por su escaso entendimiento. Está claro que quien no puede joder en casa va a fornicar fuera. ¡Qué panda Puri! Uno repía y el otro hace coro. No es fácil desasnar a tanto animal sin bozal y encima, según tu amiga, apenas se distinguía a la señora ante la envergadura de los mastuerzos.
- Este hecho, aparentemente simple, tiene que hacernos reflexionar, mayormente, y no solo por eso tan extendido de que los comportamientos se contagian; los que entienden -llámense psicólogos- lo denominan contagio emocional, afirmando que es un fenómeno psicológico por el cual los individuos -léase también individuas- tendemos a compartir las mismas emociones que están experimentando las personas de nuestro entorno. Lo malo es que este hecho no solo tiene que ver con las emociones, sino también con las conductas derivadas de ellas. Es lo que hace que los comportamientos, no solo en el mundo de los humanos, se propaguen fácilmente. Y lo que es más grave, esta sintonía que se establece con otros ocurre no solo ocurre de manera consciente, también se puede dar de forma inconsciente. Esto ya lo estudiaron, en 1993, Elaine Hatfield y sus compañeros John Cacioppo y Richard Rapson. Seguro que, si mi amiga lo hubiera sabido, habría sido capaz de detectar, como antes de abrir la bocaza, ambos tíos manifestaban gestos similares. ¡Desarrollo que me enrollo!, antes de la convergencia emocional hubo una equiparación conductual, Y ¡ojo!, no estamos hablando de empatía, que es la capacidad de una persona para ponerse en el lugar del otro.
- No me jodas Puri, que estos fenómenos son muy peligrosos porque demuestran lo fácilmente manipulables que podemos ser los mortales si algún loco quiere utilizarlo para cometer atrocidades.
- ¡Y que lo digas! En esto sí estoy muy de acuerdo con Freud, padre del psicoanálisis, y en lo actual que sigue siendo su obra sobre "Psicología de las masas y análisis del yo" aunque escribiera su libro en 1921, hace más de cien años. Afirma que los seres humanos no dominan todos sus actos de manera consciente (tercera herida narcisista) y que toda psicología individual es también social porque el yo siempre tiene presente en sus pensamientos y acciones al otro.
- ¡Qué iluminado! ¡Estaba adelantándose y analizando las barbaridades cometidas por las turbas agresivas de monstruos como Adolf Hitler, Josef Stalin, Mao Zedong, Leopoldo II de Bélgica, Hideki Tojo, Pol Pot, Kim II Sung y tantos otros que los emularon.
- La manipulación pública se sigue utilizando hoy día a través de los medios de comunicación y la política, aunque no asesinen en masa, un suponer, para nuestra tranquilidad. Aprovechan, en su provecho, valga la redundancia, lo que dice Gustav Le Bon: la masa es siempre intelectualmente inferior al hombre aislado. Pero, desde el punto de vista de los sentimientos y de los actos que los sentimientos provocan, puede, según las circunstancias, ser mejor o peor. Todo depende del modo en que sea sugestionada.
- Joder ¡qué mierda! ¿Y todo se hace por seguir a un líder?
- Te equivocas de nuevo tía, afirma Delgado que, para conformar una masa no es imprescindible un líder. Una idea negativa puede tener un carácter aglutinante. ¿Te imaginas lo que puede conseguir que arraigue en la gente un sentimiento como el odio, por ejemplo a los inmigrantes, a las personas diferentes. incluso a las gallinas no criadas en libertad, por quitar hierro al asunto? Según Sylvain Timsit, la masa es una patología democrática, nos arengan desde los medios y élites políticas, y analiza cuáles son las estrategias que siguen. Destacaría, sobre todo, cómo son capaces de crear problemas a la vez que soluciones, infantilizar al interlocutor, apelar más a las emociones que a la reflexión y reconocer al otro como ignorante y mediocre. ¡Casi nada!
- ¡Me cago de miedo Puri! Y todo esto ha venido porque se metieron con una señora en el banco.
- La mayoría de los fenómenos que se dan en una sociedad moderna y digital como la nuestra, tienen explicación a través de la psicología. Está estudiado casi todo sobre comportamientos humanos.
- ¿Eso quiere decir que volverá a ser presidente Pedro Antonio Sánchez, que diría mi amiga Begoña? Me rilan las piernas sólo de pensarlo. Hoy necesito un gin bien cargadito ¿Hace?
- Cómo diría Don Camilo, ¡hace! Y diré a mi amiga que no se raye, no tenía ninguna opción.
- Cien por cien Puri, cien por cien.