TORREZNOS DE SORIA

- ¡Jo Puri! Que dicen mis amigas que desde que nos ha dado por la reflexión del interiorismo ya casi no se parten el culo con nosotras como al principio. Y es que creo que andamos muy serias dando que pensar…

- Y que lo digas Vani, pero es que la vida es tan injusta que hay que darle al intelecto para encontrar un poco de equilibrio sin vertirnos hacia los lados.

- Pues hoy vengo yo que no quedo en mi de gozo, ¿te acuerdas de mi sobrino Monchito? ¿el hijo de Mari Blanca? !Le han dado el primer premio de pintura creativa en el colegio! Y es que la criatura tiene madera para ser un genio tipo Picasso o Miró, un suponer. Menos mal que mi hermana llegó a tiempo para hablar con la directora y lo pudieron apañar, que si no, el niño se hubiera frustrado, y a estas edades es importante que crezca sano y sin traumas. ¡Para algo mi cuñado es el presidente de la Fundación de Cervatillos Huérfanos de Guadarrama (FCHG)!

- Pero tengo entendido que tu sobrino era de bodegones y el tema de este año eran las verduras en época otoñal, ¿no?

- Tía, estuvimos hace poco en Soria y probamos los torreznos (aunque somos más de gambas), y el niño, que ya te digo que es un genio, en un momentito hizo unos trazos en azul, que nos quedamos todos maravillados. ¡Torreznos! ¿Ves como también tiene que ver con los bodegones? Pues nada, a triunfar y salir de su zona de confort; si tiene que pintar remolacha, que la pinte, y quien diga que no le salieron bien los torreznos es que no entiende de creatividad bien entendida. Está claro que le echó imaginación, y al fin y al cabo es comida, ¿qué más da boquerones que zanahorias o torreznos?

- Pues visto así… que se jodan los que pintaron bien tomates y lechugas creyendo que se premiaba el esfuerzo. Pero digo yo, ¿y Monchito sabe lo de su madre? Porque tal vez es mejor que esté en la ignorancia más absoluta, porque si no le dan el empujoncito…

- Pero ¿tú de qué vas? Ilusos hay muchos y la criatura es mi sobrino. ¡Cualquier madre haría lo mismo! Aunque pensándolo bien, tal vez, si se acostumbra a conseguir lo que quiere… algún día se va a esnafrar de hocicos, que la gente es muy retorcida y el niño un poco raro… y Miró, tampoco le veo muy Miró…

- Vani, una cosa es el refuerzo positivo que favorece que una determinada conducta se repita con mayor frecuencia para establecer patrones de comportamiento deseados, que de eso sabe mucho Skinner, y otra que el niño se crea que todo el monte es orégano y se engañe pensando que su dibujo es mejor que el de sus compañeros que ni siquiera entraron en lid. Me da que, en este caso, el refuerzo positivo se os ha ido de las manos…

- ¿Te parece que vamos de culo si le reforzamos cada vez que hace un dibujo? Porque en este caso, la pintura era suya y se esforzó un huevo con los azules, aunque fuera un torrezno de Soria…

- Solo si va unido a la mentira, porque a Monchito le veo crecidito y con el ego inflado como un globo de feria, digo yo. Busca refuerzo externo, social y, a la vez, se autorrefuerza para mejorar su autoestima. Tiene que entender que solo se puede comprar con dinero aquello que tiene precio. La riqueza emocional no lo tiene, porque es más feliz quien puede disfrutar de las personas que quiere y que le quieren, y de todo lo que ha tenido que ganar con esfuerzo -y no digo que él no se esfuerce-; pero no lo que te regalan por cuna o por méritos de otro. Sería bueno que tu sobrino lo aprendiera cuanto antes. Pueden reconocerle, pero no amarle y eso, si no le jode ahora lo hará en el futuro. Decía Jacques Lacan que lo que tiene precio se compra; lo que tiene valor se conquista.

- No te rayes Puri, que el dinero lo compra casi todo, digo yo.

- Ni de coña Vani. ¿Puede comprar la felicidad? Es decir, ¿el sentirte a gustito cuando alcanzas tus metas? Pues no; ¿el afecto y confianza entre personas que no son familia?, tampoco; ¿el amor de alguien con quien deseas compartir tu vida? Me parto el culo, ¡no! aunque te susurren al oído cielito lindo; ¿el respeto?, lo que menos, ni la lealtad… ni tantas cosas como el equilibrio y la paz mental, los modales, el sentido común, el propósito de la vida, el gusto por lo bonito, la belleza natural, la integridad, los amigos, el amor de la familia, la confianza, el talento, la humildad, la clase, la justicia, la honestidad, el respeto, la juventud… Frank Sonnenberg tiene una lista de cincuenta cosas que no compra el dinero de tu cuñado.

- Mira tía, que la cosa no es para tanto, que no van a poner Los torreznos de Soria en El Prado y que mi sobrino está feliz como una perdiz. No lo jodas tú ahora con Skinner y con Sonnenberg, que al primero lo conozco por el condicionamiento operante con los perros y del otro ni he oído hablar. Está claro que unos nacen con estrella y otros estrellados, un suponer, con mucha sue-alunamarte, que lo consiguen todo fácilmente o con mala sue-alunamarte y muchos problemas. Depende de cómo te tomes las circunstancias de tu vida y, a veces, también se estrella uno mismo, aunque haya nacido con una brillante en el culo, y no tiene que ver con el zodíaco… ¡La vida es fluir!

- Vani, no me vengas con moralina barata, ¿A cuántos enchufaos has conocido a lo largo de tu vida? Yo ni puedo contarlos porque no tengo dedos suficientes incluyendo los de los pinreles; la mayoría de mis compañeros son hijos de… y no hace falta decir que casi todos son mediocres ¿y qué? La vida es una tómbola, ton, ton, tómbola… de luz y de color ¡oooh!, de luz y de color, ¡oooh!… y el que nace lechón muere gorrino, a no ser que sea un genio de cojones, un suponer.

- ¡Qué no somos niñatas, joder Puri! ¿no te hubiera gustado tener una mano que te ayudara a subir y ganar pasta? Seguro que sí, la vida con puntillas es más feliz y se da el golpe quien se lo piensa, porque tú siempre has sido un poco pava y te morirás pava. Por cierto, me han dicho que vieron al Sebas tomando café en el Central hace unos días con una pareja muy maja…

- Es imposible, a esas horas estaba trabajando agobiado, como siempre. Es lo que cuenta Piluca.

- Otra pava crédula, que tiene una cornamenta que no le cabe por el arco del Triunfo de Berlín. Y la chica lo sabe, pero no se quiere dar por aludida, aunque se lo digamos; creo que el tío cuando pone carita melosa la encandila siempre. ¡Amores intermitentes! Ahora sí, ahora no, ahora te achucho, ahora me la pela María Elena.

- ¡C´est la vie! Y yo no he born under a lucky star, aunque me hubiera gustado. Como la Pilu, me lo sigo creyendo todo y siempre me han pagado con amor y abrazos que atesoro. ¿A estas alturas me pesa? Creo que no… los cambios profundos son difíciles o casi imposibles de conseguir. Mal momento para la lírica y menos para dar la voltereta.

- Tengo seco el gaznate Puri, ¿nos alegramos con una birra fresquita y dejamos de pensar en lo de la estrella en el culo? Porque ya, ni de coña, colega.

- Cien por cien Vani, cien por cien.