Así comienza el primer libro, publicado por la Editorial LAROUSSE, “No me quieras tanto y ámame mejor”, del coach experto en vínculos emocionales y relaciones de pareja, Jordi Panyella Soler.
Son tres, fundamentalmente, los objetivos que se plantea el autor a la hora de proponernos su obra. En primer lugar, que el lector sea capaz de cuestionarse esas creencias que le acompañan desde la infancia y que toma como incuestionables; en segundo lugar, que consiga descubrir conceptos y herramientas nuevas para aplicar a sus relaciones y, por último, generar ganas e ilusión para seguir explorando y aprendiendo en el universo de las relaciones conscientes.
El libro se divide en catorce capítulos conformados por distintos apartados, en los que, de manera clara y sencilla, expone y explora, echando mano de su amplia experiencia como coaching y terapeuta y de teoría psicoanalítica, el intrincado mundo de las relaciones de pareja en esa búsqueda constante del amor verdadero. Y es que las relaciones de pareja han cambiado mucho en los últimos años; la monogamia, panacea de nuestros padres y madres, ha derivado en poliamor, swingers, e incluso anarquía relacional. Todo esto sin que, la mayoría, hayamos descubierto aún quienes somos realmente. Querer menos y amar mejor, es un reto si queremos crear una relación de pareja consciente.
Panyella propone leer el libro en función de los intereses de cada cual, avanzar, retroceder, subrayar…Para él, lo importante es que sea una herramienta útil. Si empiezan por el final, que sepan que han llegado a la Ruptura y, aunque parece la consecuencia lógica para acabar el libro, deja un regusto amargo porque toda pérdida conlleva la elaboración de un duelo y un sufrimiento profundo, a pesar de que lo plantee como la esperanza de iniciar un nuevo camino a través del conocimiento más profundo de nosotros mismos, de querernos mejor, y la experiencia acumulada en esa relación fracasada. Propongo una lectura al revés, comenzar por el final y acabar con las reflexiones y consejos sobre mantener viva la pasión en una relación de pareja. Es decir, ¡acabar en alto! Seguro que nos vendrá bien aprender a mirar con ojos nuevos y pasarlo bien y divertirnos juntos. ¡Eso sí es todo un reto para parejas de larga duración! El mundo ha cambiado tanto que en la era digital en la que las nuevas generaciones están inmersas, se rigen más por la satisfacción inmediata que en las que se basaban en la necesidad de pertenencia, seguridad o continuidad. Por eso, afirma el autor, es posible que no tengamos ni idea de lo que es amar; por eso nos lanza una pregunta ¿estás amando a tu manera? Porque ya no se lleva eso de sufrir por amor.
El verdadero reto de nuestra vida consiste en desaprender todo aquello que nos han dicho que somos o debemos ser y descubrir por nosotros mismos quiénes somos para poder disfrutar de una vida adaptada a nuestros propios valores y objetivos.
Panyella basa la felicidad en el autoconocimiento, conseguido a través de la identificación de esos lastres y heridas emocionales que arrastramos desde la infancia, para ser capaces de gestionar correctamente nuestras emociones y las de nuestra pareja, puesto que son las que determinan la imagen del “yo”, y a la vez, responsables de nuestra autoestima. Y no olvidemos que, la autoestima, determina nuestro amor propio. Por eso, ¡ÁMATE MUCHO!, porque amarte significa creer que mereces ser feliz; respetarte y ser fiel a tus valores; saber perdonarte y soltar la culpa cuando sea necesario; ser coherente con tu propia bondad; es decir sí cuando quieres decir sí y decir no cuando quieres decir no; tener el valor para tomar tus propias decisiones y ocupar el lugar que te corresponde en tu vida, no el que los demás decidan por ti… “Ámate tanto que amar a los demás sea siempre una opción y jamás una necesidad”.
La mente miente, porque en función de nuestras verdades interpretamos la realidad; será necesario, pues, desactivar esas creencias limitantes que constriñen el amor y la pareja. La clave está en el vínculo que, desde la pareja consciente, comparten dos personas. Ambas son responsables de cuidar ese vínculo. Huyamos de las relaciones inconscientes y tóxicas y de exigir que la otra persona sea responsable de nuestra felicidad. La baja autoestima, la falta de autoconocimiento, el miedo a la soledad y creencias limitantes acerca del amor y la pareja nos pueden jugar una mala pasada y ser responsables de nuestra infelicidad. Hagamos esas creencias conscientes para que la imago -representación de las figuras parentales- no se convierta en la búsqueda de un amor ideal.
Para que una relación perdure y se consolide, es fundamental que la comunicación funcione correctamente, un problema que se agrava con las comunicaciones digitales, puesto que esos mensajes que enviamos adolecen de comunicación no verbal, lo que lleva, en demasiadas ocasiones, a que sean mal entendidos y aboquen en conflictos debido a la interpretación subjetiva que hacemos de esa realidad.
¿Somos fieles a tiempo parcial? ¿Es la infidelidad una vía de escape? Esta claro que, cuando aparece, las bases y estructuras sobre las que se asienta la relación se tambalea, aunque la infidelidad sea más antigua que el matrimonio. Seguro que nada volverá a ser como antes, y perdonarla solo puede significar aprender de lo ocurrido. Aunque no se olvide.
Y, para terminar, como sugería al principio, destacar lo que nos traslada el autor para que la pasión no decaiga cuando nos alejamos de las condiciones iniciales que generaron esa atracción porque, no nos engañemos, la pasión se va perdiendo con el tiempo. Habrá que cuidar los ingredientes que la pusieron en marcha: novedad, experimentación y descubrimiento, misterio, cierta dosis de peligro, riesgo, sorpresa, impredecibilidad… y también seguridad, predictibilidad, codependencia, confianza, apoyo, compañía… ¡No debemos dejar de mirar con ojos nuevos! Tampoco ignorar que la pasión está directamente relacionada con la polaridad… porque los polos se atraen, independientemente del rol que asuma cada miembro de la pareja en cada encuentro. La sexualidad ha de ser consciente y huir de los problemas que está acarreando el porno como escuela de aprendizaje para nuestros jóvenes, porque las relaciones sexuales van más allá del intercambio de placer entre dos personas. Podremos mantener relaciones sexuales con muchas personas, pero no podemos hacer el amor con cualquiera.
Acabo con una reflexión curiosa, sacada de su experiencia como terapeuta: la pasión necesita aire y el deseo necesita espacio. Parejas que seguían fuertemente atraídas, no vivían en la misma casa… echar de menos es un elemento afrodisiaco.
¡Tarea nos manda Jordi Panylla! No me quieras tanto y ámame mejor es un libro para releer, para pensar, para hacer una reflexión profunda. Les invito a que se quieran mucho, ¡serán más felices!
Jordi Panyella Soler (Barcelona, 1974) es coach avalado por la International Coach Federation. Apasionado del autoconocimiento y de las relaciones interpersonales, se ha especializado en los vínculos emocionales y en las relaciones conscientes de pareja. Además de realizar sesiones de coaching individuales y terapia de pareja, organiza talleres y retiros de empoderamiento. Su comunidad de Instagram, @comoesdentroesfuera, acoge miles de seguidores que interaccionan con él en cada post.
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