Monique Ilboudo, escritora burkinesa comprometida con los derechos de las mujeres de su país miércoles 13 de julio de 2022, 09:21h
"Le mal de Peau" de 1990 fue la primera novela publicada por una autora reivindicando el valor femenino contra abusos patriarcales. Monique Ilboudo es activista, docente, diplomática, poeta… siempre defensora convencida de los derechos humanos en Burkina Faso. Monique Ilboudo nace en Uagadugú en el año 1959. Después de estudiar en la universidad de la capital de su país (antiguo Alto Volta) se traslada a Francia para terminar sus cursos y regresa a su país tras doctorarse en derecho. Durante unos años ejerce como profesora en la universidad de Uagadugú. Aceptó el cargo de Ministra para la Promoción de los Derechos Humanos. Desde su juventud no ha dejado de escribir y lo ha seguido haciendo en forma de artículos, poemas y novelas; ha plasmado sus inquietudes y su observación personal en columnas de crítica y opinión sin miedo ni cortapisas sobre el poder que ejercen los hombres en el control de las relaciones íntimas con las mujeres. Poligamia y procreación, nada que ver con el amor ni el deseo femeninos, parámetros existentes todavía en muchos países del continente africano. Durante 1998, con motivo del genocidio de Ruanda acaecido en 1994, la escritora participa en una reunión colectiva celebrada en Kigali junto a un grupo de literatos africanos para reflexionar sobre el papel y la función de la escritura como medio y recurso para evitar el olvido y recuperar la memoria histórica de lo sufrido por hutus y tutsis. Fruto de este encuentro social, en 2001 se publica su novela Murekatete, cuyo título significa “déjala vivir” en clara referencia a la protagonista, acuciada por los recuerdos de tan funesta lucha fraterna. La técnica que emplea es la de biografía ficticia, una primera persona que atrapa al lector por su intensidad y la dureza del contenido. En 2008 pasa a representar al gobierno de Burkina Faso gracias al nombramiento que recibe de embajadora en los países nórdicos y bálticos con un cometido claro: la responsabilidad de iniciar y establecer importantes y fructíferas relaciones diplomáticas con el norte de Europa. Su producción literaria es incesante y obtiene el Grand Prix du Burkina Faso por su novela Le mal de peau cuyo argumento pone en jaque temas tan espinosos y controvertidos como el amor interracial de los personajes principales, el fenómeno del colonialismo y sus efectos que envuelve la historia nuclear y el mestizaje. Plantea cuestiones muy vigentes más allá del paso del tiempo. Conviene insistir en la excelente técnica que emplea la autora para plasmar con sensibilidad y plasticidad una serie de sentimientos sinceros y convulsos que conmueven al lector por el tratamiento real y veraz del ambiente, tan conocido, en el que se inserta la historia. Siempre con Burkina Faso sobrevolando sus libros, destacan otros títulos como Droit de cité: être femme au Burkina Faso. Si loin de ma vie o Carrefour des veuves. Todos ellos auténticos mosaicos históricos sociales y culturales de un país africano por el que sigue luchando. Puedes comprar sus libros en:
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