Dentro del siempre inagotable estudio analítico, de todo tipo, que se realiza a ese filón denominado Régimen Nacionalsocialista de Alemania; estigma que seguirá pesando como una losa sobre la patria de Ludwig van Beethoven, Wolfgang von Goethe, Richard Wagner, Emmanuel Kant, Friedrich Schiller, Johann Sebastian Bach o Albert Einstein, entre otros de mayor o menor enjundia, a pesar del tiempo transcurrido y de que hubo muchos alemanes, indudablemente, que lucharon y murieron contra el austriaco Adolf Hitler; hoy tenemos a esta obra, estupenda y esclarecedora, que narra este fenómeno de la oposición contra el Fhürer Adolf Hitler. “El verano de 1935, en un lago cerca de Berlín, un joven estaba pescando cuando vio a una mujer recostada en la proa de un barco que pasaba. Sus miradas se cruzaron en lo que supuso el inicio de una apasionante historia de amor, pero también de una de las mayores conspiraciones de la historia. Harro Schulze-Boysen ya había derramado sangre en la lucha contra el nazismo cuando Libertas Haas-Heye y él iniciaron su romance arrollador. Ella se sumó a la causa, y poco tiempo después los dos amantes ya dirigían una red de luchadores antifascistas repartidos por todo el bajo mundo del Berlín bohemio. El propio Harro se infiltró en la inteligencia alemana para comunicar los planes de batalla de los nazis a los Aliados, incluidos los detalles del ataque sorpresa de Hitler a la Unión Soviética. Pero nada podía preparar a Harro y a Libertas para las traiciones que sufrirían en aquella guerra de secretos, una lucha en la que la línea que separaba a los amigos de los enemigos era muy fina”. El autor se ha fundamentado, para este estupendo libro, en un número importante de diarios inéditos, epístolas y documentos, provenientes de los archivos de la siniestra y criminal Gestapo (Geheime Stadt Polizei). Desde hace un tiempo, ya dilatado, los alemanes escriben, y francamente muy bien, sobre su pasado histórico del lamentable III Reich, desde 1933 hasta 1945; y esta es una obra de ese cariz, y muy destacada, también el nombre de la colección es riguroso: ‘EL TIEMPO VIVIDO’. La Gestapo llamó a este grupo de resistencia como ‘LA ORQUESTA ROJA’. Estas dos personas provenían de campos políticos muy diferentes, aunque ambos siempre lucharon contra el régimen nacionalsocialista. La pareja de amantes siempre fueron unos intrépidos luchadores contra el terror del NADPS o Partido Nacional Socialista Obrero Alemán. En el mes de abril de 1933, Harro Schulze-Boysen, que ya era un jovencísimo editor de 23 años de la revista independiente OPPONENT, sería arrestado, de forma inmisericorde, por estos ‘hombres de negro’ de las SS y torturado a conciencia, ya que cualquier detenido por esos esbirros perdía todos los derechos más mínimos. El Führer tenía la absoluta conciencia de su divinización y, por consiguiente, no entendía como cualquier alemán se podía oponer a su doctrina. Su mejor amigo, en dicha publicación, sería un judío llamado Heinrich Erlanger, el cual moriría en los calabozos de la SS. Será, pues, a partir de ese momento cuando Harro Schulze-Boysen buscará la venganza contra sus torturadores. Es pues en este momento histórico cuando conoce a su futura pareja, una noble alemana llamada Libertas Haas-Heye; estamos en el año 1934, y esta joven perteneciente a una aristocrática familia alemana se adherirá a él como su gran amor y, además, alrededor de ellos se comenzará a formar un grupo cohesionado de oposición al régimen nacionalsocialista; serán más de un centenar de personas, preparadas intelectualmente y comprometidas políticamente, e igual número de mujeres que de hombres; todos ellos se enfrentarían sin el más mínimo miedo al terror nacionalsocialista, y a aquel régimen genocida tan oprobioso. Aunque muchos de los hechos narrados en esta magnífica obra parezcan de ficción, nada más lejos de la realidad, ya que los hechos mencionados son total y absolutamente reales. El propio Norman Ohler lo indica, de forma taxativa. “Considero particularmente importante en este caso, donde la verdad ha sido distorsionada muchas veces, no alimentar más aún la leyenda, sino informar con la mayor precisión posible combinando mis competencias de narrador y la responsabilidad del historiador. Todo lo que aparece entrecomillado está documentado con una fuente. Aún así, este no es un libro académico y he intentado meterme en los corazones y las mentes de sus personajes empleando unos recursos más propios de un novelista que de un historiógrafo”. Sería un empleado del Instituto de Anatomía de la Universidad de Berlín, quien estuvo presente en las ejecuciones de la pareja, el 22 de diciembre de 1942. Los cadáveres fueron introducidos, con muy poco respeto, en ataúdes de madera, desde allí serían llevados hasta el hospital de la Charité de Berlín, donde serían estudiados por el profesor Herrmann Stieve, como especímenes humanos merecedores de análisis, por su inexplicable comportamiento de oposición a la ‘perfección casi absoluta que era el nazismo’, según el razonamiento de los criminales del NSADP. El cuerpo de Harro sería utilizado para la realización de prácticas de anatomía de los estudiantes de medicina de la Universidad de Berlín. Por el contrario Libertas no sería enterrada en Liebenberg. Nada debería evocar su recuerdo, y no tenían el más mínimo derecho a descansar en paz. Sus restos mortales fueron llevados al crematorio de Zehlendorf; y sus cenizas esparcidas por lo desconocido. El libro no tiene desperdicio, y está dentro de esa pléyade de bibliografía genial que nos ilustra sobre ese régimen criminal, como lo fue el nacionalsocialismo; pero sería de interés la existencia del mismo número de análisis para el otro régimen criminal, primo del nazismo por antonomasia, como fue el estalinismo, y que suele pasar de rositas por la historia; cuando está claro que Rusia no se ha sacudido, ni lo hará todavía, la forma estalinista criminal de gobernar. En suma, recomiendo total y absolutamente esta obra de la editorial Crítica, que merece todos los blasones y loas habidos y por haber. “Ni la bala, ni la soga, ni la guillotina tienen la última palabra, ni pueden nuestros jueces decidir sobre el Juicio Final”. ¡Sobresaliente volumen! «Nobis cum semel occiderit breuis lux». Puedes comprar el libro en:
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