Del 20 al 24 de abril, la compañía interpretará en el Teatro del Barrio El Gran Inquisidor, un monólogo vehemente, iracundo y mordaz que protagonizan Nacho Marraco, Carlos Guerrero y Marta García, con dirección de Marita Heras. Fue en Los Hermanos Karamazov, que se considera la novela más representativa de Dostoyevski (la última que escribió, publicada en 1880, cuatro meses antes de que muriese el escritor), donde se incluye el poema en el que está inspirada la pieza. En la novela, es Iván, uno de los hermanos, el que se lo cuenta a Aliosha, otro de ellos. Contiene una crítica a la Iglesia Católica y su acción en España.
El Discurso del Gran Inquisidor admite múltiples interpretaciones y tiene entidad filosófica propia, independiente del resto de la novela que la integra. Es muy expresiva del pensamiento de Fiódor Dostoyevski, de la misma manera que El rey Lear condensa, en gran medida, el universo de Shakespeare. La historia se desarrolla en Sevilla en tiempos de la Inquisición. Allí, el Gran Inquisidor le reprocha a Jesús que, por mucho que su intención hubiese sido salvar a la Humanidad, se comportó como si no la amase, porque le dio una enorme dosis de libertad, y con ella (asegura el Inquisidor), la desorientó.
El texto es, en suma, una profunda exploración de la fe, el sufrimiento, la naturaleza humana y la libertad: ¿cómo puede hablarse de libertad si la obediencia se compra con pan? ¿Puede haber pan si libertad? ¿Somos gregarios y conformistas? ¿Qué encarna un poder absoluto? Iván y Aliosha dialogan sobre la fe en Dios y la figura de Cristo, la libertad y la esclavitud del hombre, la compasión y la muerte.