El Teatro Colón de Bogotá vio como el 24 de noviembre de 2016 el Gobierno de Colombia y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) suscribían un Acuerdo de Paz que iniciaba una nueva época en el conflicto armado colombiano. El camino hacia la firma del documento entre las FARC-EP y el ejecutivo colombiano encabezado por Juan Manuel Santos estuvo lleno de complicaciones. Anteriores procesos de negociación, a mediados de los años 80 y finales de los 90, habían fracasado, mientras que los contactos que aplanaron el camino hacia el Teatro Colón se extendieron durante más de cuatro años antes de dar frutos. El último obstáculo fue el referéndum nacional que rechazó el acuerdo firmado en primera instancia en Cartagena de Indias entre las FARC y el gobierno. El pacto fue renegociado y finalmente aprobado por el Senado y la Cámara de Representantes. La implementación del acuerdo se inició en 2017, y hasta el momento ha tenido un grado de cumplimiento limitado y desigual tanto geográficamente como en sus distintas áreas de afectación. En su último libro, “Colombia (2016-2021): De la paz territorial a la violencia no resuelta”, Jerónimo Ríos Sierra, doctor en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense de Madrid, presenta un oportuno retrato de los cambios e inmovilismos que han acompañado al Acuerdo de Paz en su primer lustro de implementación. El prólogo ha sido escrito por Ernesto Samper Pizano, quien fuera presidente de Colombia entre 1994 y 1998. El exmandatario recalca que en los últimos años algunos enclaves geográficos están experimentando una reproducción del conflicto nacional. Samper califica la posibilidad de un retorno más amplio del conflicto es “una dura realidad: preocupante pero todavía evitable” (p. 11). Ríos había publicado anteriormente, en 2017 y también en Libros de la Catarata, la obra “Breve Historia del Conflicto Armado en Colombia”. Los dos libros, separados por cuatro años de distancia temporal, son complementarios. Mientras que el primero ofrece una perspectiva histórica mucho más amplia, el segundo se circunscribe a lo acontecido en los últimos años, aunque también ofrece un breve repaso a la historia del conflicto. “Colombia (2016-2021): De la paz territorial a la violencia no resuelta” se estructura alrededor de un capítulo inicial analizando el cumplimiento de los acuerdos en distintas áreas de actuación para luego fijarse en las disidencias de las FARC-EP y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que no ha llegado a ningún acuerdo con el estado colombiano. Ríos también discute la violencia de los grupos de narcotraficantes y los paramilitares. Es como mínimo sorprendente que el libro llegué a su fin abruptamente, sin una conclusión que sintetice los capítulos anteriores. En cuanto al contenido del libro, es difícil no coincidir con el autor en su afirmación de que “la firma de un acuerdo de paz no es más que el comienzo de todo” puesto que “lo verdaderamente difícil reposa en la transformación de las estructuras socioeconómicas, territoriales y simbólicas que se asocian a la violencia” (p. 44). En este sentido, la última obra de Ríos presenta una útil radiografía de los obstáculos que han acechado al Acuerdo de Paz, entre ellos la elección de Iván Duque como presidente de Colombia en 2018 o la supervivencia de estructuras guerrilleras en la frontera colombo-venezolana. El libro de Ríos presta especial atención a la geografía política del conflicto armado, y en algunos fragmentos el nivel de detalle de sus análisis puede resultar excesivo al lector, especialmente si no está familiarizado con el territorio colombiano y su administración territorial. Eso no obstante, las páginas del último estudio de Ríos incluyen numerosos gráficos y mapas (la mayoría de elaboración propia) que facilitan la comprensión del texto. El lector muy probablemente habría agradecido la inclusión de más fragmentos de las entrevistas que Ríos llevó a cabo en su documentación para el libro, algunas de ellas con comandantes históricos de las FARC como “Iván Márquez” y “Jesús Sentrich” (alias con los que se conoce a Luciano Marín Arango y Seuxis Pausías Hernández Solarte, respectivamente). De hecho, los fragmentos de entrevistas que Ríos incluyó en su “Breve Historia del Conflicto Armado en Colombia” eran de gran interés e ilustraban el punto de vista de actores contrapuestos en el conflicto colombiano. “Colombia (2016-2021): De la paz territorial a la violencia no resuelta” es un libro de gran relevancia contemporánea en cuanto ayuda a comprender por qué el Acuerdo de Paz de 2016 ha representado un importante cambio, pero no un punto final en un conflicto armado que tiene más de medio siglo de antigüedad. El último libro de Ríos, empero, no es probablemente el mejor punto de entrada para aquellos que quieran iniciarse los entresijos del conflicto colombiano. En tal caso, “Breve Historia del Conflicto Armado en Colombia” es una mejor opción y permitirá igualmente al lector aprender del abundante conocimiento que Jerónimo Ríos Sierra atesora sobre la realidad colombiana. Puedes comprar el libro en:
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