¿Os imagináis un mundo sin electricidad? ¿Qué ocurriría si de repente lo aparatos electrónicos dejaran de funcionar?

¿Os imagináis un mundo sin electricidad? ¿Qué ocurriría si de repente lo aparatos electrónicos dejaran de funcionar? ¿Y si no fuera posible realizar una acción tan sencilla como encender la luz? Formamos parte de una sociedad donde los relojes han pasado a un segundo plano en favor de una pantalla, donde las redes sociales tienen mayor importancia que la realidad y donde la tecnología es una compañera de vida… ¿Cómo actuaríamos si el mundo tal y como lo conocemos cambiara? Lidia Fernández Galiana plantea esta situación en El chico de las flores, una novela de ciencia ficción en la que imagina cómo sería la vida de las personas si ya no pudiesen utilizar la tecnología. La historia transcurre 30 años después del Apagón, nombre con el que se conoce al suceso que acabó con la electricidad. Elizabeth, una de las protagonistas, es una muchacha que se ha visto obligada a formar una nueva familia. Junto a sus hermanos adoptivos vive en el Tren y trata de sobrevivir como puede. Su momento favorito del día es visitar a Oliver (al que ella llama el chico de las flores), en la floristería del pueblo. Sin embargo, el joven esconde un secreto peligroso… un secreto que pondrá en riesgo todo lo que Elizabeth más valora.

El chico de las flores es el comienzo de una extraordinaria bilogía futurista. Lidia ha creado una novela llena de intriga, aventuras y mucha tensión en la que unos personajes icónicos y perfectamente construidos se enfrentan a una amenaza intergaláctica. La inspiración para esta historia le llegó a su autora cuando se encontraba paseando por la playa. Sin embargo, fue la cuarentena la que le proporcionó la oportunidad de plasmar sus ideas sobre el papel. El 13 de septiembre Editorial Hidra publicará esta obra y los lectores tendrán la oportunidad de conocer el mundo ideado por Lidia: un lugar inquietante donde un peculiar grupo de protagonistas se verá envuelto en una aventura que puede costarles la vida.

En conclusión, El chico de las flores es una novela de ritmo ágil que mantiene una sensación de tensión e incertidumbre a lo largo de todas las páginas. La ambientación de la obra y las detalladas descripciones de los escenarios transmiten la confusión y el caos que reina en la Tierra tras el Apagón. Además, Lidia ha conseguido plasmar a la perfección las diferentes emociones que podrían experimentar las personas en una situación así: por un lado, la desesperación y el miedo, pero, por el otro, la capacidad de superación, la valentía y el amor.

Sinopsis:

Una historia futurista de supervivencia perfecta para fans de The Promised Neverland.

Han pasado treinta años desde el Apagón, un suceso que acabó para siempre con el uso de la tecnología y la electricidad en la Tierra. Como consecuencia, miles de huérfanos tienen que subsistir como pueden en un mundo cada vez más hostil.

Elizabeth vive en el Tren junto con sus hermanos adoptivos, que ahora son su familia. Su momento favorito de la semana es cuando visita al que todos llaman «el chico de las flores», Oliver, que regenta la floristería del pueblo.

Pero este lugar esconde un secreto que cambiará la vida de Elizabeth y sus hermanos para siempre: una amenaza se cierne sobre la humanidad, y se acerca algo que podría depararles un destino muy oscuro.

Lidia Fernández Galiana es actriz, escritora y creadora de contenidos para redes sociales que hablan, entre otras cosas, de literatura. En internet es conocida como Entre Tulipanes.

Desde muy temprana edad manifestó un gusto muy agudo por la pintura, la escritura y la interpretación. Siendo estas dos últimas las que más ha desarrollado a lo largo de su vida. Escribe desde joven, y en 2017 autopublicó su primera novela "En época de tulipanes".

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