Covadonga García, expone 40 cuadros pintados con la técnica de la acuarela porque le parece que es atractiva por su luminosidad y versatilidad. Le ofrece luz y transparencia, cosa que otras técnicas no lo hacen. La artista quiere mostrar sus emociones, sus sentimientos, sus esperanzas y su trabajo para alcanzar una misma meta, el agradecimiento por la vida.
De carácter autodidacta, ha realizado varias exposiciones individuales en centros de Guadarrama y las Rozas, en Madrid, también ha formado parte de algunas muestras colectivas. En ocasiones ha aceptado encargos de todo tipo de particulares, menos retratos: “dibujar rostros nunca se me ha dado bien”, confiesa, Covadonga García.
Los cuadros que ahora cuelgan de las paredes del Invernadero de los Bonsáis, en el Real Jardín Botánico, de Madrid muestran a los visitantes, una variada muestra de lugares, unos más conocidos, otros menos, que de alguna manera han llamado la atención a la pintora que quiere rendir su particular homenaje a aquellas personas que han fallecido a consecuencia del Covid 19 y a sus familias que en ocasiones no han podido despedirse de sus seres queridos. “Es una forma de estar agradecida por estar viva y el dolor que ha dejado la pandemia”, comenta la doctora:
Así, por ejemplo, tenemos cuadros que reflejan la floración de algunas plantas en primavera verano. Otros nos muestran aspectos que solo se pueden ver en invierno. Utiliza la luz de las distintas épocas del año para reflejar lo que ve a través de su corazón, aunque le gusta tomar notas en forma de fotos que ella misma realiza a primera hora del día o cuando el sol esta desapareciendo por el horizonte.
Dice la doctora que “pintar la relaja, le ofrece sosiego y evasión después de un duro día de trabajo en el hospital.
Disfruta y aprende con lo que hace.
Algunas de las obras expuestas ya las había creado antes de la pandemia pero, en su mayoría, las pintó durante la fase de aislamiento. Aprovecho para pintar a un sanitario anónimo abrazando un ramo de tulipanes de los cientos que el Real Jardín Botánico, donó a varios hospitales y residencias públicas de Madrid.
“Quiero brindar mí sencillo y humilde homenaje a todas las personas que se han ido y a sus familias en especial a nuestros mayores, las personas que levantaron este país en los momentos más difíciles de nuestra historia, a quienes tanto debemos y tenemos que agradecer, y que se han ido injustamente, con discreción, sin hacer ruido.”, comenta con una amplia sonrisa.
Esta exposición se puede visitar desde el 17 de Julio al 20 de septiembre en el Invernadero de los Bonsáis, en el Real Jardín Botánico de Madrid RJB-CSIC con acceso libre previo abono de la entrada
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