Basada en hechos reales, “La gallera” es un demoledor thriller donde podremos conocer un submundo de nuestra sociedad, el de la pelea de gallos y el negocio que se genera a su alrededor. Con lenguaje descarnado y duro, Ramón Palomar nos conduce por una historia viajera donde encontraremos episodios totalmente desasosegadores. Esperemos que sus muchas ocupaciones periodísticas no nos hagan tener que esperar otros seis años para leer su próxima novela. Han pasado seis años desde que publicó su novela “Sesenta kilos”. ¿No son muchos años de silencio? Sí, quizá sea demasiado tiempo. Pero mis obligaciones diarias me impedían ir más deprisa...Trabajo en una emisora de radio y en un periódico... Escribo durante las vacaciones... De ahí la espera... Por otra parte me gusta madurar las tramas, los personajes, en fin... ¿Le ha costado todo ese tiempo documentarse y escribir “La gallera”? No, ya tenía las historias y la "documentación". Conozco gente que conoce gente que se dedica a actividades ilegales, sólo tenía que maquillar lo suficiente los personajes y sus fechorías... Incluso darles verosimilitud porque algunas de sus movidas resultan demasiado increíbles. No soy escritor de imaginación, sino de observación. Por cierto, ¿qué es una gallera? Una gallera es el ruedo donde combaten los gallos de pelea. Cuando eran legales, en todas las ciudades encontrábamos unas cuantas. Ahora las hay, pero son ilegales y mueven mucha pasta, muuucha. Hay peleas donde las apuestas alcanzan el millón de euros. La novela está fechada en el año 2000. ¿Siguen habiendo galleras por nuestra piel de toro? Sí, y muchas más de las creemos. En barrios alejados del centro, en polígonos industriales... ¿Todos queremos ser gallos y nos quedamos en gallinas? Vivimos en una sociedad gallinácea que se rige por lo políticamente correcto, lo cual nos arrastra hacia la vulgaridad, el aburrimiento, el pensamiento único y perezoso. ¿Tiene su novela algo de road-movie criminal? Ojalá. Soy un fan de "Bad Lands" (Terrence Malik) y de "Carretera asfaltada en dos direcciones (Monte Hellman), dos road-movies legendarios. Siempre me gustó el género. Un traficante novato, un legionario corrupto, un poli sediento de venganza y un sicario infalible son sus protagonistas. ¿Ha sido complejo montar ese puzle? Un poco. Pero todos fluía porque lo tenía muy masticado. Entrelazarlos salió de una manera natural... ¿A cuál de esos personajes le tiene cariño, si eso es posible? Al gallero Basilio Galipienso, verdadero sabio de la ciencia gallística. Adora sus gallos. Habla con ellos. Les mima, les cuida, les arrulla, les protege... ¿Consideraría su novela como coral? Sí. Otra cosa que siempre me encantó: esas películas corales de Berlanga... ¿Es una novela de venganzas? Totalmente. Todos actúan motivados por su sed de venganza. Todos tienen razones para buscar venganza. ¿Se ha basado en algún hecho real para escribir la novela? Sí, casi todo está basado en hechos reales. El tiroteo del primer capítulo es real. Cambié la localización y un par de detalles. “En nuestro país disfrutamos de un lumpen igual de bellaco que el de USA”En “La gallera” nos encontramos unos protagonistas violentos y sedientos de venganza. Ese lumpen que describe nos lo podemos encontrar en nuestro país o es más bien americano. En nuestro país disfrutamos de un lumpen igual de bellaco que el de USA. Sólo hay que fijarse. Vivimos bajo la bota cultural anglo y babeamos con sus historias porque estamos inundados por ellas, pero aquí tenemos mucho que contar con nuestros propios delincuentes. ¿Acaso no fue El Arropiero un asesino en serie de la talla de un Edward Kemper o de un Ted Bundy? Se cargó a más de 40 personas, creo recordar... Como nuestra industria audiovisual no es comparable a las de los USA y vivimos tiempos dominados por la imagen, creemos que aquí hay menos, pero proporcionalmente nadie nos tose. Sus protagonistas tienen una característica en común, además de violentes, y es que son unos corruptos. Viniendo de Valencia como viene. ¿Está acostumbrado a la corrupción de todos nuestros estamentos: policial, militar, judicial, etc.? Hombre, algo de eso hay... Pero por desgracia sucede en cualquier rincón... Los Pujol en Cataluña, los ERES de Andalucía, y en el caso Gurtel el epicentro se sitúa en Madrid... Está muy repartida la corrupción, jajaja...
Me han gustado mucho las citas del comienzo de la novela. ¿Ha querido comprender el negocio de las galleras sin juzgar? No puedo comprender que algunos tipejos disfruten con espectáculos de sangre, pero no me atrevo a juzgarlos porque vienen de lugares siniestros y no podían escapar a su destino... Con no juzgarles severamente me conformo. Ellos creen que sus actuaciones responden a la normalidad que han vivido desde pequeños, y cuando les intentas explicar que se equivocan no están muy por la labor. En cualquier caso, yo narro y procuro lanzar una historia tremenda y vertiginosa que yace a nuestra vera. ¿Sigue siendo el oficio de escribir sanguinario, como decía Josep Pla? Creo que Pla acertó (como siempre) con esa frase. Sudas sangre escribiendo porque buscas el ritmo, el tono, las palabras, los adjetivos, las descripciones... Hay algo sangriento en toda esta solitaria búsqueda... ¿Tendremos que esperar otros seis años para leer una nueva novela suya? Pues ya veremos... No tengo ni idea... Primero habrá que consolidar "La Gallera" y vender muchos ejemplares para obtener rentabilidad... Digo yo... Puedes comprar el libro en:
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