La adolescente Marta Chacras pensaba presentarse a delegada de su curso en el instituto, pero una jugarreta del destino hizo que se conformase su candidatura a la presidencia de Betulia, y los habitantes de ese país, que gira en torno a los abedules, votaron de forma mayoritaria a la niña en lugar del omnipresente Héctor Rufián, un político corrupto hasta las trancas que no tiene nada que ver con el simpático político catalán. “Escogí el nombre por lo que significaba, no por nuestro Rufián”, señala la escritora con una enigmática sonrisa. En la novela, la autora pone graciosos nombres a los protagonistas según sus trabajos. ¡Y que mejor nombre que poner Rufián a un político!
Igual que hay una película con título “Princesa por sorpresa”, el de “Presidenta por sorpresa” es un gran título para una película de Disney. ¡Desde luego que no desmerecería! A la novela, si la sobra algo es humor. Género maltratado en nuestro país injustamente. A los británicos lo único que deberíamos copiar es su gusto por la literatura de humor, donde tienen grandes escritores, de lo demás es mejor correr un tupido velo, sobre todo desde que se les ocurrió eso del brexit.
Sara Cano lleva más de diez años trabajando en diversas editoriales en el campo de la literatura infantil y juvenil. Traductora, correctora y, finalmente, escritora ha tocado todos lo palos de la profesión. “Presidenta por sorpresa” es su nueva novela donde despliega todo su sentido del humor. “Parto desde el humor, que tiene un poso de verosimilitud, para ir hacia el disparate, como es que una niña gobierne el país durante tres meses”, explica la autora.
“En la actualidad, no hay libros sobre política para los niños y creo que a través del humor se les puede hacer llegar los fundamentos de lo que es un sistema democrático y que conozcan sus perversiones, como el abuso de poder o la corrupción”, expresa con desenvoltura. En su opinión, “los niños son muy lectores y quieren leer libros de los que obtengan una recompensa inmediata, quizá por la influencia de tanto videojuego o de series de televisión”.
Para la autora, “si un libro no engancha desde el primer capítulo, los jóvenes lectores no siguen con él”, de ahí que haya que cuidar mucho el planteamiento de las novelas, además, “no debe suponer mucho esfuerzo su lectura”. “A los niños se les puede hablar de cualquier cosa, no hay que tratarlos como mentalmente inferiores”, subraya con decisión. Y si es con humor, los niños lo agradecen, todo lo contrario que los adultos “que si no se trata un tema de forma seria, lo suelen desestimar”, señala la escritora de literatura infantil. “Asimilar el humor a la falta de seriedad es un error muy de adultos”, ratifica. Además, considera Sara Cano que “hacer humor siendo mujer es más difícil todavía”.
“Me gusta hacer caricaturas de personajes que existen en la realidad”
La escritora de edebé quiere dejar claro que hay más mujeres en este tipo de literatura que hombres. “Todo lo contrario que en géneros como la novela negra, la histórica o la ciencia ficción, aunque cada vez hay más mujeres que se adentran en estos tipos de géneros con mucho éxito”, expresa la autora de “Presidenta por sorpresa”. “Muchos adultos consideran el género de literatura infantil y juvenil como menor, lo cual es un error monumental”, afirma tajante Sara Cano.
Otro de los grandes errores es que los adultos no “suelen leer literatura infantil, aunque muchos padres cuando se acercan a mí con sus hijos reconocen que han leído el libro y les ha gustado. Es un error pensar que por leer este tipo de libros se baja un escalón. Hay que abandonar esa idea. Grandes escritores han hecho sus pinitos en el género especialistas como Michael Ende, Gianni Rodari, Roald Dahl, entre los escritores extranjeros y como Elia Barceló, Begoña Oro o Ana Campoy, entre los españoles, entre otros”.
Los límites del humor se deben establecer en no caer en la crueldad
“El humor en la literatura infantil es fundamental. Yo utilizo muchas caricaturas de personajes reales en mis libros. Los límites del humor se deben establecer en no caer en la crueldad, que nadie se sienta ofendido”, expone la entrevistada y agrega “es sano reírse de cualquier cosa si lo haces desde una posición de respeto”. Así, las propuestas que puedan parecer descabelladas se digieren mejor. “Tenemos un hartazgo sobre los políticos tradicionales, de ahí que Marta Chacras sea un antídoto contra este tipo de políticos”, sentencia atinadamente.
Es la madre de la protagonista la que la salva en las situaciones más enjundiosas. Ferviente ecologista, tiene soluciones para casi todo. “Hay que concienciar a los niños que preservar la naturaleza es muy importante. Sabemos que es incómodo ser ecologista, pero la pervivencia del planeta requiere ciertos hábitos que Marta Chacras madre lleva hasta las últimas consecuencias”, dice Sara Cano.
“La literatura sirve para transmitir valores”, asevera la autora durante nuestra charla y agrega “de ahí que sea un vehículo para hacer llegar cierto tipo de mensajes”. Son varios los mensajes que Sara Cano hace llegar a los menudos lectores en su libro: la importancia de la política en nuestras vidas, el calentamiento del planeta, el abuso de poder o la corrupción urbanística o de todo tipo. La autora describe, en primera persona y a los ojos de la niña Marta Chacras como es el mundo actual. Y todo con mucho humor. Falta humor en el mundo y, sobre todo, en la política. Marta Chacras ha llegado para que cambiemos nuestra visión. Para finalizar, la autora nos anticipa que sus historias continuarán en un futuro muy muy cercano.
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