Marivi, como periodista que es, estuvo allí, y aporta un punto de vista singular, el suyo propio, gracias a un don que la acompaña en todo momento: el de la ubicuidad políticamente correcta e incorrecta que termina dando a sus fotos una cierta aura e incrementando su gran capacidad de evocación. Mérito añadido es el suyo porque no hay que olvidar que la fotografía, en aquellos años, era una ciencia manual y analógica.
Y no había tantas reporteras fotográficas, mujeres, que eligieran tirar por ese camino. Estas fotografías plantean un recorrido libre cuya disposición en este libro nos permite reflexionar acerca de la curiosa intención de convencer y contar informando gráficamente, sin prescindir en ningún momento del valor estético y descriptivo que posee cada encuadre en sí mismo. Actitud y provocación, contraponiendo imágenes, retratos y actividades en multitud de lugares y situaciones bien distintas.
Cada imagen va acompañada de un texto escrito por personajes de la época: camareros, periodistas, músicos, artistas, fans, catedráticos y demás, todos ellos compañeros de viaje de Mariví desde entonces. Nombres propios a los que la fotógrafa ha pedido un texto que contase historias reales, poemas, entresijos, nostalgias o simplemente aportase algo de luz al contexto del momento, la historia sociopolítica de la época, incluso algunos han hablado de sí mismos, y otros han definido con tan solo unas palabras una impresión del momento captado. Cada uno ha venido a poner lo que le ha apetecido y en muchos casos algunas de estas personas se han mostrado de una manera insospechada, sorprendente, tocadas muy profundamente por aquella década.
Lo que realmente cuenta son las imágenes en sí mismas. Una muestra de los sorprendentes cambios que ha experimentado la sociedad española desde entonces. Escenas que invitan a una reflexión que ha de ir mucho más allá de la nostalgia. Fueran mejores o peores, queda suficientemente claro que aquellos años, en este país, fueron algo irrepetible.
Marivi Ibarrola, fotoperiodista autodidacta, retrató con su cámara Nikkormat una etapa clave de la cultura musical y artística española durante los años 80. Sus fotos se publicaron en distintos periódicos, revistas y fanzines de la época y su archivo fotográfico narra toda una generación de personajes y ambientes que marcaron un hito en el siglo pasado. Con su trabajo contribuyó a forjar definitivamente la cultura joven emergente de la época y abrió camino a la creación de nuevas secciones y suplementos de los periódicos de información general, dando cobertura gráfica a muchas de las facetas que nos brindó esa década singular. Marivi sirvió de precedente para las generaciones posteriores y marcó un antes y después en el fotoperiodismo en la década de los 80, bajo la mirada de una mujer.
Actualmente ejerce de Asesora de Prensa y Promoción en diversos campos y es profesora asociada de Fotoperiodismo del Departamento de Periodismo y Comunicación Audiovisual de la Universidad Carlos III de Madrid.
Marivi Ibarrola inició su carrera como fotoperiodista comienzos de la década de los ochenta y capturó con su cámara una generación de artistas que transformaron la cultura joven española.
Sus fotografías ilustraron publicaciones como Rock Espezial, Ruta 66, Muskaria, Rockdelux, Diario Vasco, Diario 16, Interviú, Madrid Me Mata, Tintimán y multitud de fanzines.
Este libro recoge una selección de su archivo personal y es un cercano retrato de un período intenso y esencial en el devenir de la escena musical y cultural española de los últimos treinta años.
Cada una de las fotos, en su mayoría inéditas, va acompañada de un texto escrito por gente partícipe de aquellos años: Diego A Manrique, Alaska, Loquillo, Patricia Godes, Jaime Urrutia, Ignacio Juliá, Cristina Lliso, German Coppini, Santi Carrillo, Julián Hernández, Josele Santiago, Sabino Méndez, Jaime Gonzalo, Mikel Erentxun...
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