La serie es seguida diariamente por muchos espectadores que les gusta recordar o rememorar un pasado reciente vivido o conocer lo que sucedió durante los años más duros de la dictadura. Al rebufo de la serie se han publicado, hasta el momento, tres novelas y se está preparando una cuarta que se titulará Amapola. El libro La cocina de Manolita y Marcelino ha conseguido vender casi 50.000 libros en un año.
Para Jaume Banacolocha, productor de Diagonal y de la serie, “los personajes nos están enseñando la realidad de la España de aquel momento” y no cree que el cambio de gobierno pueda afectar al desarrollo televisivo de la serie, más bien cree que los posibles recortes económicos puedan afectar a las series de su productora. Desde diversos medios de comunicación se ha atacado el sesgo ideológico que tienen sus producciones, sobre todo la serie La República, de la cual en la actualidad se están grabando nuevos episodios. Esta serie, probablemente, su peor producción, tiene una marcada ideología que la convierte en un vulgar folletín sin sentido que parece mentira sea asesorado por historiadores.
Sin embargo, Amar en tiempos revueltos, ha sabido conectar con los espectadores, su mezcla de drama, comedia, melodrama, teatro del absurdo, ha calado profundamente y es seguida por un millón de telespectadores todos los días. El mérito de llevar 1.500 episodios, con unos guiones que transmiten emoción, nostalgia y sentimiento, es del trío formado por Pelayo, Manolita y Marcelino, que conforman una original familia que sirve de nexo de unión a la serie.
Los únicos personajes que permanecen desde la primera temporada -y ya van siete- son ellos, los encargados de dar vida al bar El asturiano que, por cierto, hoy tenían en el menú lentejas. Suponemos que siguiendo la receta de su anterior libro publicado. Al trío se ha unido la nieta de Pelayo, Leonor, y es entre abuelo y nieta donde se monta el armazón del libro en un diálogo que va contando de manera coloquial la historia íntima de esa España donde la dictadura, el exilio, el racionamiento y la represión, entre otras cuestiones, se forjan a una nueva generación de españoles que serían los protagonistas de la Transición.
Josep Lluis Sirera ha sido el encargado de poner negro sobre blanco esta historia coloquial, “cuando Diagonal, la productora, me encargó un libro sobre la historia de Amar en tiempos revueltos pensé que era un encargo complicado y difícil y, como no era lógico escribir una historia convencional, pensé en organizar la historia tal y como la ven los personajes de El Asturiano”, dijo el historiador valenciano en la presentación del libro.
Porque la familia de esta tasca de barrio encarna al español medio de los años cincuenta y Pelayo y su nieta Leonor, que tiene en la serie 14 años y en la Transición tendrá 33 años, son los protagonistas de un diálogo en el que va saliendo esa historia cotidiana, en las explicaciones del abuelo a la nieta, explicaciones llenas de cariño y de memoria, porque como ya hemos oído muchas veces: quien olvida su historia está condenado a repetirla una y otra vez.
“El libro se inicia en el año 43, en plena Segunda Guerra Mundial, y se acaba en el 56, justo en el año que llega, por fin, la televisión a España. Es un buen punto final para el libro”, señala el autor. Para este profesor universitario el mayor hallazgo del libro es que “habla de historias sin hablar de historia”, tiene rigor histórico, tiene rigor crítico pero, a su vez, es un libro muy gráfico. No está organizado cronológicamente, sino que trata los principales temas de forma puntual. Sirera ha buceado en la serie buscando que todos los personajes más emblemáticos sean protagonistas de la serie, pero lo ha conseguido a medias, porque ha llegado a utilizar a unos 200 personajes, pero otros 100 no han podido aparecer, lo cual hubiese sido un trabajo ingente.
Los actores que dan vida a los protagonistas quisieron aportar su granito de arena a esta presentación, Pelayo, (José Antonio Sayagües), opina que “el libro está bien estructurado, es muy coloquial y plasma la época desde diferentes puntos de vista, social, económico, emocional, etc. Y leyéndolo me acordé de mi abuelo que me contó sus experiencias de esa época y lo hacía desde el lado más duro porque perdió” y agregó emocionado “pienso que mi abuelo le enseñó a escribir a Sirera”.
A Manolita, (Itziar Miranda), cree que el libro enseña cómo fue España de una manera divertida y le recuerda el libro de El mundo de Sofía que enseñaba la filosofía de una manera similar a la que éste enseña la historia de España.
Para Marcelino, (Manu Baqueiro), la obra es “un libro de la historia de España que la acerca” y entre bromas y chanzas señala que es el mejor que ha editado Plaza & Janés después del suyo de La cocina de Manolita y Marcelino. En mente tiene un segundo volumen pero el trabajo, de momento, le impide tener la tranquilidad necesaria para acometerlo con resultados satisfactorios. Mientras tanto, Manolita y Marcelino, Itziar y Manu, se entretienen en los descansos de la grabación cocinando para sus compañeros. Un hobby con el que han cosechado un gran éxito… culinario.
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