La presentación del libro fue la más espectacular que este cronista recuerde, de un gusto exquisito y de una originalidad tremenda. Los medios gráficos tuvieron que esperar casi veinte minutos a que el tren llegase a la estación y la máquina llegó rodeada de un aura de misterio y savoir faire. El factor indicó al tren donde debía parar y los mozos de estación sacaron su equipaje compuesto de varias maletas llenas de sus libros. Posó para los fotógrafos con amabilidad y se sometió a todo lo que le indicaron.
Pasada esta sesión fotográfica comenzó una rueda de prensa en la que se mostró muy atento y cordial, conexquisitez británica. La caída de los gigantes es el primer volumen que ve la luz de su trilogía The Century. Trata el comienzo de siglo XX y la Primera Guerra Mundial desde distintos puntos de vista, incluyendo la Revolución Rusa de 1917. El próximo volumen se publicará en 2012 y tratará de la Segunda Guerra Mundial, el tercero y último se centrará en la Guerra Fría y se publicará, si todo va bien, en 2014.
Ken Follett ha escrito con esta 26 novelas, casi todas best sellers desde El ojo de la aguja. Ha vendido más de 100 millones de ejemplares y sólo de Los Pilares de la Tierra ha vendido más de cinco millones de ejemplares en España. Sin duda alguna el libro más leído en la última década en nuestro país. De La caída de los gigantes se han impreso 750.000 ejemplares en una primera edición para España y Latinoamérica y en poco más de 20 días ya se han hecho dos reimpresiones de 50.000 ejemplares cada una.
Ken Follett explicó, de forma coloquial, el argumento de su libro. Comienza con el protagonista Billy Williams, que a la edad de trece años comienza a trabajar en una mina de carbón. “Mi abuelo materno hizo exactamente lo que hizo Billy y mi otro abuelo, Tom Follett, participó en la Primera Guerra Mundial igual que Billy”, explicó el novelista galés.
Sobre el libro aclaró que no es propiamente una historia tal cual sucedió en la realidad, pero que era su historia y la de los lectores, por lo tanto no es un libro de historia pero lo que sucede en él está lo suficientemente bien documentado para que parezca real. Para Follett el secreto de la literatura es que la historia tiene que tocar el corazón de los lectores, “que la historia vincule al lector con lo que está leyendo, si no será un fracaso”, aclaró.
Reconoció que tiene muy en cuenta las opiniones de los lectores a la hora de escribir un libro. “Algunos me preguntan por qué algunas escenas son tan violentas o por qué incluyo tantas escenas de sexo; tengo en cuenta sus opiniones pero no me dictan lo que tengo o no tengo que escribir”, afirmó entre sonrisas.
Reconoció que tiene muy en cuenta las opiniones de los lectores a la hora de escribir un libro. “Algunos me preguntan por qué algunas escenas son tan violentas o por qué incluyo tantas escenas de sexo; tengo en cuenta sus opiniones pero no me dictan lo que tengo o no tengo que escribir”, afirmó entre sonrisas.
A su entender la escena más difícil de escribir fue el asedio al Palacio de Invierno de San Petesburgo porque la información sobre ese acontecimiento le llegó de un modo parcial, “no hubo fuentes que lo viviesen en su integridad”, matizó y añadió que “la batalla del Somme fue la parte del libro con la que más orgulloso estoy y para mí fue una satisfacción enorme escribir esa escena”.
Según Follett, los héroes de la novela son los que luchan por el cambio y los más conservadores no luchan por ese cambio, eso se ve bien en el texto. Billy es un héroe, al igual que su hermana Ethel, que lucha por un mundo mejor, como el bolchevique Grigori Peshkov. En cambio el conde Fitzherbert es un recalcitrante conservador que sólo lucha por sus intereses económicos y es capaz de dejar tiradas a las personas que no comulgan con sus ideas. Estos no pueden ser héroes y sus contradicciones se reflejan perfectamente en el libro.
Hay que tener en cuenta que el escritor siempre ha mostrado su apoyo al Partido Laborista y su mujer Bárbara ha sido diputada en la Cámara de los Comunes por 13 años. Esto se refleja en la novela y los líderes laboristas o social-demócratas son bien tratados, en cambio los conservadores son presentados de forma más despiadada.
Hace escasas fechas pudimos verle en televisión haciendo un “cameo” en la mini serie televisiva Los Pilares de la Tierra, ha sido tal el éxito de la serie que en junio del año que viene se comenzará a rodar Un mundo sin fin, también con una duración de ocho horas. Respecto a La caída de los gigantes dijo que “llevarla a la pantalla será más difícil porque tiene múltiples escenarios, mientras que de las otras dos, su escenario principal es el pueblo de Kingsbridge”, concluyó.
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