La de Revólver es la historia de los últimos veinte años de actividad musical de Carlos Goñi, un músico forjado desde abajo, desde los garitos de rock de los años 80.
Hablar de Revólver es hacerlo, por tanto, de Carlos Goñi, un músico sincero y honesto, que se ha dejado jirones de piel, de vida en cada una de sus canciones, en cada uno de sus discos. Un creador que ha perseguido la excelencia musical, la canción perfecta, que ha investigado sonidos, que nunca ha querido quedarse anclado en el pasado, que ha sido siempre fiel a sí mismo y a lo que el corazón le ha dictado.
Atesora Carlos Goñi con Revólver un cancionero envidiable, de esos que emocionan, que conmueven, en el que las letras tienen valor literario por sí mismas, pero en el que las músicas -girando alrededor del rock, pero mirando a otros géneros-, siempre extraordinarias, van a la búsqueda de la mejor melodía, de superar lo ya escrito, de exigirse más a sí mismo. Quizás por todo ello, el público, masivamente, ha estado de parte de Revólver, acompañándole en un viaje que se inició, hace ahora, veinte años. Que no son nada, pero que lo son todo.