Se presenta en Madrid el primer volumen de las "Obras Completas" de María Zambrano
jueves 23 de octubre de 2014, 13:23h
Por Javier Velasco Oliaga
Hoy se ha presentado en Madrid el primer volumen de las Obras Completas de la pensadora andaluza María Zambrano, publicado por Galaxia Gutenberg / Círculo de Lectores. La magna obra de la discípula de José Ortega y Gasset se va a reunir en seis voluminosos tomos. El primero en salir a la luz es el tercero, que recoge sus obras publicadas entre 1955 y 1973. La edición corre a cargo del escritor y crítico cacereño Jesús Moreno Sanz.
Las Obras Completas han sido diseñadas en orden cronológico. El tercer volumen, compuesto por siete libros son los hitos más significativos en su camino hacia la plena madurez, siendo El hombre y lo divino, con el que comienza este volumen, su “libro nuclear de toda su obra”, según ha señalado el editor Jesús Moreno, y el que ha marcado la pauta de la secuencia de libros que se ha seguido para realizar sus obras completas. “El oxímoron –el imán irradiado- de toda su obra”, afirmó el crítico.
Moreno explicó el proceso que se llevó a cabo para la realización de toda su obra, en la que han colaborado tanto el ministerio de Cultura como la consejería de Cultura de Andalucía, así como el ayuntamiento de su localidad Vélez-Málaga, que por medio de la Fundación María Zambrano están colaborando en dar a conocer la obra de su pensadora más insigne como albaceas de todo su legado y de la gran cantidad de texto inéditos que conservan en el archivo de la fundación.
Cada volumen estará precedido de un estudio preliminar y cada libro de una presentación más extensa y crítica. Todos los libros cuentan con la participación de un especialista que ha sido encargado de llevar a cabo cada edición. Moreno contó el plan de la obra. Después de este primer volumen se publicará el sexto tomo, que son los Escritos autobiográficos, donde podremos encontrar el pensamiento más íntimo de la autora y nos sorprenderá lo espiritual que era.
“A mucha gente no le va a gustar nada que diga que rezaba todos los días y, sobre todo, al Espíritu Santo”, afirmó el editor Moreno, que a su parecer este hecho puede levantar ampollas entre muchos de sus seguidores que no se imaginaban que esta pensadora exiliada y muy feminista, sobre todo en sus primeros tiempos, fuese tan espiritual y que afirmase en sus escritos que “Occidente avanza hacia su suicidio”, y más aún que iba ella hacia “el camino del Islam”. Para el crítico cacereño, Zambrano era “la última voz de la Institución Libre de Enseñanza, muy influenciada por su padre y por Antonio Machado y la situación tan azarosa en la que vivió la convirtió en una persona profundamente espiritual”.
Esa faceta suya parte del nacimiento de su razón poética, entendido como el término griego poiética, razonadora, todo es filosofía, todo es cuestionable y todo es pensado. Su pensamiento siempre ha sido muy en “espiral”, señala el editor Fernando Muñoz, que ha realizado las presentaciones y edición de dos de los libros: Los sueños y el tiempo y El sueño creador.
Ese pensamiento en espiral, debido a sus múltiples vicisitudes humanas, la hicieron que no corrigiese sus textos, esa labor la aburría. Por eso, estas obras completas tienen un doble valor, ya que se han corregido todos sus textos, yendo a las fuentes y se han subsanado muchos errores como los referentes a sus escritos sobre Picasso, de ahí que señalen los editores que “se ha estado leyendo mal a María Zambrano”.
Agustín Andreu, filósofo y teólogo, amigo de Zambrano, contó su relación con la pensadora malagueña. “Conozco a María desde hace 50 años, desde que yo tenía 24 y estaba exiliado en Roma estudiando”. Calificó la nueva edición como “descomunal y quijotesca”, un fantástico esfuerzo que nos hará conocer a la “Dulcinea del pensamiento” y poéticamente continuó refiriendo que la obra “es un bajel varado en la playa puesto ahí para que todo el mundo pueda leer su pensamiento de la unidad profunda de la clase milenaria que han construido los hombres para vivir y que es la civilización occidental”.
Para comprender esa civilización hay que leer a Zambrano y sentir la pasión por España que ella sentía desde la lejanía del exilio y que también sentía toda la escuela de Ortega y Gasset. “Hace falta sentir la presencia de España, la que les ha faltado a las dos o tres últimas generaciones que no la han sentido”, expresó el teólogo y abundó más diciendo que pese a todos los avatares de los intelectuales que tuvieron que pasar por el exilio, “no hay quien corte el pensamiento intelectual de un pueblo”.
María Zambrano tiene las cicatrices de una vida trágica, de ahí que sus escritos reflejen las grandísimas penurias que tuvo que soportar en Puerto Rico. De ahí, también, la fragmentación de su obra pero “ella está viva en sus escritos”, señaló Pedro Cerezo, catedrático de Historia de la Filosofía y patrono de la Fundación de María Zambrano, además de profundo conocedor de su obra y de los filósofos que sufrieron el exilio después de la guerra civil.
El alcalde de Vélez-Málaga, Francisco Ignacio Delgado Bonilla, y presidente de la Fundación, está empeñado en dar a conocer la obra de la pensadora, “en hacer más cercano y popular su pensamiento” y en esa labor está trabajando. Quiere crear en el municipio una ciudad del pensamiento y un premio que lleve el nombre de la filósofa y que premie la labor de desarrollo, fomento y estudio hacia la igualdad de las personas. Para ese galardón quiere como presidenta a la princesa Leticia, ya que a su parecer encarna lo que María Zambrano significa.
La descomunal obra que hoy se comienza a editar con el primer volumen, libro de más de 1.500 páginas, con casi 400 de ellas de edición crítica, con anejos y notas, va a poner en las librerías todas las páginas que escribió una persona que vivió gran parte de su existencia en el exilio físico y toda su vida en un exilio interior. Aún así, no la temblaba el pulso ni al escribir, ni ante los hombres, ni tan siquiera ante su maestro José Ortega y Gasset.
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