El libro reúne los ingredientes que habitualmente asociamos con el diario −prosa directa, sinceridad, ausencia de sofisticación, confidencia…− con un componente de denuncia: es la historia de una mujer que desde niña se ve obligada a liberarse de cualquier estructura moral para poder sobrevivir. El lector se enfrenta, sin subterfugios de ningún tipo, a la existencia de una mujer condenada al horror de la violación y a la humillación sin que nadie la ayude o se preocupe por su suerte.
La autora cuenta su historia sin adjetivos ni metáforas de ningún tipo. El horror, primero tiene la cara de su padre y después la de todos aquellos que acaban utilizándola. Pasado el shock del incesto inicial, el lector descubrirá que la condena al infierno no eran las agresiones de su padre, sino todo lo que llegará después.
Puedes comprar el libro en: