Con Títeres de la magia volvéis a Marabilia, territorio que ya inaugurasteis en Sueños de piedra. ¿Qué tiene de especial Marabilia para que tantos lectores digan haberse quedado atrapados en él?
No podemos decir lo que tiene para el público lector, pero sí podemos decir lo que significa para nosotras. Marabilia es una tierra de magia, donde cualquier cosa puede suceder, pero también es un punto de encuentro de unos personajes que sentimos muy humanos. La fantasía acaba siendo una excusa, un paisaje en el que contar historias que creemos que pueden ser muy reales. De alguna manera, Marabilia se ha convertido para nosotras en un refugio al que tenemos que regresar de vez en cuando y sus personajes son ya como una extraña familia.
Supongo que como autoras será una suerte (y todo un reto) poder seguir explorando y conociendo ese territorio mágico.
¡Muchísimo! Y cuanto más ahondamos, más queremos saber sobre cada territorio y cada personaje que nos va saliendo al paso. A veces, de hecho, es un poco abrumador, porque se nos abren más frentes de lo esperado. Podemos pasar días enteros hablando sobre detalles que nunca verán la luz, pero que hacen el mundo mucho más real a nuestros ojos. Y aunque queremos descubrir más, tampoco queremos anclarnos sólo en Marabilia, porque sabemos que también es bueno un cambio de aires, para luego volver a estas historias con otra perspectiva.
Títeres de la magia está protagonizada por Hazan, el desastroso y entrañable hechicero que ya aparecía en Sueños. ¿Por qué os decidisteis a escribir un spin-off de Sueños de piedra con este personaje?
En parte, por pura curiosidad. Al final de Sueños, la historia de Hazan queda abierta, y no pudimos evitar preguntarnos: «¿Qué pasaría después con él…?». El resto llegó sin pensarlo. Hazan, además, es un personaje que está presente durante toda la historia de Lynne y Arthmael, pero que nunca tiene la oportunidad de hablar con voz propia, aunque tenga mucho que contar.
La novela transcurre tres años después de Sueños de piedra. Durante todo este tiempo los personajes han evolucionado de forma notoria, ¿verdad?
Desde luego. La evolución de Hazan es la más clara. Aunque sigue conservando (o eso esperamos) esa inocencia y esa candidez que lo caracterizaban en Sueños de piedra, se ve que se plantea cosas de las que antes nunca se atrevió a dudar. Cuando tenía catorce años creía en cuentos y en que todo era posible: quería cumplir su sueño costase lo que costase. Ahora, con diecisiete, sin embargo, empieza a plantearse si su esfuerzo realmente lo hace avanzar o si sigue en el mismo punto. Y, además, tenemos la oportunidad de ofrecer la evolución de Lynne y Arthmael; de cómo el tiempo les ha hecho crecer de muchas formas diferentes. Por otra parte, presentamos nuevos personajes, y eso también era un reto: a Lynne, Arthmael y Hazan el lector de Sueños de piedra ya los conocen, pero a Clarence no y, sin embargo, tenía que lograr conquistar tanto como esos personajes a los que los lectores quieren volver a ver. De todos modos, Títeres de la magia es una novela autoconclusiva que quien no haya leído previamente Sueños de piedra también podrá disfrutar, por lo que teníamos que marcar evoluciones a lo largo de toda la historia, no sólo en comparación con la novela anterior.
Hazan y Clarence, hechiceros, deben salir de su cómoda Torre para encontrar el origen y el antídoto de unos venenos que circulan por Marabilia, ¿qué supone esta partida para ellos?
Para Hazan, un respiro de sus estudios. Una vuelta a las aventuras que vivió con Lynne y Arthmael, y también una oportunidad de encontrarse a sí mismo. En un momento en el que duda de todo y, sobre todo, de sí mismo, este viaje le dará la oportunidad de verlo todo desde otra perspectiva.
Para Clarence, que jamás ha estado lejos de los muros de la Torre, que siempre ha sido su hogar y su refugio, salir será descubrir el mundo en toda su extensión: lo bueno y lo malo. Él cree que está preparado para enfrentar cualquier cosa porque ha estudiado sus lecciones mejor que nadie y es un hecho probado que es un grandísimo nigromante, pero quizá la teoría y la práctica sean cosas muy diferentes…
¿Con qué va a encontrarse en esta novela el lector que nunca os haya leído?
Suponemos que con nuestro sello personal: una fantasía que en realidad es una excusa para hablar de sentimientos y personas. Es lo que nos gusta hacer y Títeres de la magia tiene mucho de eso. Además, hemos cogido a dos personajes que pueden ser muy cercanos al lector porque tienen experiencias muy mundanas: miedo al fracaso o al estancamiento, la obligación de ser quienes otros creen que debes ser, el peso de la decepción o la autoexigencia… Son cosas que todos hemos vivido alguna vez, la única diferencia es que en Marabilia hay magia.
¿Y vuestro lector fiel? Nuevas aventuras y personajes. Un enfoque diferente al de Sueños, pero con muchos guiños. Lynne y Arthmael están ahí para volver a saludar a aquellos que disfrutaron de su relación, y puede que haya algún personaje más que puedan reconocer, si se fijan bien…
En vuestros libros siempre se transmite algún mensaje. En el caso de Sueños de piedra, éste tenía que ver con los derechos de la mujer. En este caso, ¿cuál sería el mensaje? Y sé que hay temas y asuntos que no queréis desvelar (risas).
Como en Sueños de piedra, hay varios mensajes que hemos ido soltando. En Sueños hablábamos de la mujer, sí, pero también de cumplir sueños o de lo que debería ser el amor romántico para que este no sea nocivo. En Títeres hablamos, por ejemplo, de la importancia de fracasar, porque la sociedad está constantemente diciéndonos que todo va a salir bien, con un falso positivismo que muchas veces simplemente no es verdad. Sin embargo, eso no significa que al fallar en algo no podamos cambiar de camino o hacer algo al respecto. También hablamos de encontrarse a uno mismo por encima de lo que otros creen que debes ser, así como de sexualidad.
Se está preparando una novela gráfica de Sueños de piedra. ¿Podríais hablarnos de este proyecto y desvelarnos algún otro?
La novela gráfica va viento en popa. Tras el guión, que hemos hecho nosotras intentando ser lo más fieles posibles a la historia de Sueños (pero con los inevitables recortes), todo lo demás corre a cargo de la asombrosa Lehanan Aida. Hemos visto ya los dos primeros capítulos en storyboard y estamos muy contentas con lo que está haciendo. ¡Ya queda menos para 2017! Y precisamente el año que viene va a haber muchas novedades. Aparte de la novela gráfica, se publicarán tres novelas nuestras, si todo va bien. Verá la luz el proyecto Red and Gold (Alfaguara), una fantasía de ambientación grecolatina, y la segunda parte de Secretos de la luna llena, Encuentros (La Galera). Por si no hubiera suficiente de Marabilia, en este momento nos estamos sumergiendo en su tercera historia, de la que todavía no podemos decir mucho, pero de la que adelantamos que habrá piratas. Hay otros proyectos en los que estamos trabajando y Marabilia siempre es un mundo extenso al que volver, pero lo iremos desvelando poco a poco.
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