"Carrete Velado" es una historia de amor entre Poesía y Fotografía, en la que el lector no solo lee, también mira y si quiere, participa. Carrete Velado, tercer poemario de la periodista Irene G Punto consta de unos poemas diferentes, cortos, urbanos, actuales, concisos y llenos de ironía, ganas, lágrimas, risas, contradicción y lucha. Como la vida misma. Y con nuevo concepto: la interacción directa con el lector.
Es obvio el interés actual que la poesía está generando entre el público más joven que llena en masa los recitales. Hay ganas de sentir. Y una de las bases en las que se sujeta este nuevo interés es la difusión de la poesía a través de las redes sociales. Un nuevo medio de comunicación que ha sido el perfecto puente para difundir y llevar a nuevos lectores la poesía actual.
Carrete Velado incorpora este concepto en su libro puesto que, hasta la mitad del poemario, son los fotógrafos los encargados de poner la imágenes a los poemas, pero en la segunda parte se invita al lector, a través de las redes sociales y del hashtag #desvelo, a poner las fotografías a las poesías. De hecho se incorporan unas instrucciones para participar y crear una comunidad de desvelados.
Irene G Punto se puso en contacto con 14 fotógrafos profesionales para pedirles que hicieran sus instantáneas a partir de tres poemas que daría a cada uno de ellos. Y todos trabajaron en una misma dirección: jugar a revelar un carrete que ya estuvo velado. La historia que hay detrás de esas fotografías y de los poemas es que Poesía cada vez que se enamoraba de una fotografía la velaba.
O para ella o para nadie. Y en Carrete Velado el lector tiene la oportunidad de revelar un carrete que ya estuvo velado y descubrir que, pegada a cada fotografía, había una poesía.
“También con este juego visual, no solo le daba un valor añadido al poemario, sino que también de alguna manera recuperaba esa pequeña ilusión de cuando hacíamos fotos en analógico e íbamos a la tienda a ver qué fotos habían salido y cómo.
Aquí el lector no sabe qué foto se va a encontrar, no está la inmediatez de lo digital. Está la espera y la sorpresa de ir poco a poco desvelando las imágenes que acompañan a cada poema. Tiempo de observación, de reflexión, de simplemente estar”, añade la autora.
Luis Eduardo Aute abre el libro con un exquisito prólogo: “…en Carrete Velado hay coqueteos en los espejos de los aforismos, más o menos desaforados, con algún débito a los aerolitos Oryanos, alguna resonancia de los “nudos” de Ronald D. Laning, y empatías diversas con las “piezas” de Yoko Ono, entre otros…
Irene G Punto (Madrid, 1980). Licenciada en Periodismo y Máster en Comunicación Integral. Ha trabajado como redactora en diferentes revistas como DON, DT, NOX, Men´s Health, ELLE, Mía, Tú Puedes o Arte de Vivir. Actualmente es profesora de Escritura Creativa en el grado de Periodismo en la Universidad Nebrija donde a través de los diferentes géneros literarios, en concreto de la
poesía, Irene muestra a sus alumnos el oficio y la pasión de escribir.
En 2013 publicó su primer poemario Micropoesía, Macrocorazón y Mercromina (Ed Torremozas) y en 2014 el segundo, Punterías (Ed Torremozas). Ambos libros contienen pequeños latigazos de una poesía irónica, gamberra, contradictoria, cómica, desconsolada y risueña. Santo y seña de su forma de escribir y de hablarle al mundo.
Otros de sus medios de expresión son un recital fuera de lo convencional en donde Irene le habla a la cara y sin miedo a la vida. Y sus redes sociales, en donde publica poesía a diario y cuelga sus famosos microvídeos, pequeñas películas que ponen imagen, sonido y cascabeles a sus poemas.
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