Ramón Pernas, José Luis Hernández Garvi, Miguel Ángel de Uña y José Antonio Fossati
Este año el Premio Algaba ha sido concedido a los historiadores y escritores José Luis Hernández Garvi y Miguel Ángel de Uña por sendas obras sobre los Augsburgo en un intento de recuperar la historia de este país y apartar hasta cierto punto la leyenda negra que tanto mal hizo al Imperio español en los siglos XVI y XVII cuando se había alcanzado el mayor apogeo del mismo.
Los títulos de las obras son: “
Una ventana del castillo de Praga” de
Miguel Ángel Uña y “
Héroes, villanos y genios” de
José Luis Hernández Garvi. Ambos tratan sobre la dinastía de los Austrias, en ambas ramas, tanto por la parte española como la parte austro-húngara.
El premio se concede por iniciativa de la editorial Edaf y de Ámbito Cultural del Corte Inglés. El responsable de esta última, Ramón Pernas, estuvo presente en la entrega de los premios y señaló que “pese a que los premios literarios en España están en crisis, nosotros seguimos dando soporte a al menos diez premios”, lo cual tiene mérito en el páramo literario que se vive en España con un acusado descenso de las ventas en estos últimos tres años.
También asistieron, además de los autores, José Antonio Fossati, director de la editorial Edaf, que afirmó que “ambas obras premiadas abogan por la recuperación de la historia de este país y se centran en un periodo muy concreto de nuestra historia”. Los dos siglos que estuvieron gobernando los Austrias en España y que coinciden con el máximo esplendor de nuestro Imperio, y que gira en torno a la guerra de los Treinta años y a la Leyenda Negra. “Los dos libros ganadores tienen una doble lectura. Por un lado el texto de los propios autores y por otro la parte gráfica del libro”, apuntó. Dicha parte gráfica ha corrido a cargo del ilustrador Ricardo Martínez, que ha realizado un impecable trabajo de infografía.
También asistió el editor de la editorial Melquiades Prieto que recordó que en los doce años de vida del premio se ha otorgado a dieciséis ganadores, “pero ésta es la primera vez que se concede a dos libros que tratan de la misma época”, además añadió que “los Austrias se merecían ser tratados de manera distinta a la que lo han sido”. En ambos libros salen prácticamente los mismos personajes.
En su turno de palabra, el divulgador histórico,
José Luis Hernández Garvi se ha referido a que en los tiempos en los que el tema de las nacionalidades y la construcción de la Unión Europea “son cuestiones que están en entredicho” por lo que es oportuno hacer un repaso por ese tiempo de la historia en el que los reyes españoles de la dinastía de los Austrias ”estuvieron a punto de conseguir esa unión que ahora se intenta, ya que en su tiempo controlaban el 75% del territorio europeo, además de las posesiones en América y Asia”.
En su obra muestra una colección de personajes foráneos que "dieron lustre" a la España de los siglos XVI y XVII: Spínola, Doria, Magallanes, el Greco, el Bosco, Tiziano, Rubens o Andrés Vesalio, entre otros. “El propio Rubens hizo labores de embajador para la corona española en Londres, algo que no es muy conocido”, apuntó. "Son ejemplos que nos hacen plantearnos si eran extranjeros en una España cuya identidad no estaba aún bien dibujada", concretó y añadió que “las Españas, como se decía en aquella época, se podían permitir el lujo de tener en nómina a los mejores militares, geógrafos, artistas, médicos, etc que había en el mundo. Ha llegado el momento de reconocer la valía de aquellos personajes”, afirmó con rotundidad.
La otra obra ganadora ha sido "Una ventana del castillo de Praga", trabajo del escritor novel
Miguel Ángel de Uña, psiquiatra y licenciado en Historia, que hace un recorrido por la historia de los Austrias de Oriente en los tiempos que precedieron a la Guerra de los Treinta Años deteniéndose en la tercera defenestración de los Austrias.
Una época en la que se van afirmando los Estados, pero también los nacionalismos, ha señalado de Uña, que considera a la Guerra de los Treinta Años como un anticipo de otros conflictos posteriores, como la Primera Guerra Mundial. “Son muchas las similitudes que hay entre ambas guerras, sólo que lo que se vive como drama la primera vez se vive como caricatura una segunda”, concluyó el psiquiatra del Hospital Clínico de Zaragoza.
Pueden comprar los libros en: