FIRMA INVITADA

Leemos poco y el Quijote aun menos

Miguel Ángel Zamorano, James Iffland, Luis Miguel Román y Pablo Comino
Constantino López Sánchez-Tinajero | Domingo 08 de diciembre de 2024

Recientemente el Diario el País junto con la Cadena Ser han publicado una encuesta sobre los hábitos de lectura de los españoles. La encuesta fue realizada los días 29 y 30 de octubre por la empresa 40DB sobre una muestra de 2000 españoles. Los resultados fueron publicados el 23 de noviembre.

https://elpais.com/babelia/2024-11-23/la-gran-encuesta-al-lector-espanol-del-siglo-xxi-que-leemos-quien-lee-que-distingue-a-los-z.html



Según el artículo en España hay lectores, y lo fundamenta en que el 55 % de los encuestados lee de forma habitual, el 26 % son lectores ocasionales y un sonrojante 19 % lee muy poco a nada.

Los datos no parecen malos, no obstante, no son nada buenos si los comparamos con otras actividades más pasivas que necesitan de menos concentración como escuchar música en diferentes soportes (71 %), ver películas o series en plataformas (77 %) y entretenerse viendo las redes sociales desde el móvil (85 %). Esta actividad supera incluso a ver la televisión (83 %).

Datos tomados de la encuesta 40DB

En cuanto a la cantidad de libros leídos el 57 % lee entre 0 y 3 libros al año. Poco bagaje se nos hace. En cambio, el 43 % ha leído en los últimos doce meses 4 o más libros. Pero sólo un escaso 4,6 % supera el total de 20 libros leídos al año.

Un dato muy agradable y bonito es que sigue siendo mayor el número de mujeres lectoras en todas las agrupaciones de lectores por edades, pero la brecha se ensancha a su favor en el grupo de personas mayores de 60 años donde superan a los hombres por 16 puntos porcentuales.

En la encuesta se incluían algunas preguntas libres y la disparidad de respuestas hace imposible poder establecer comparaciones sobre títulos y autores. Igualmente se preguntó por un libro que hubiese sido relevante en la vida de lector y se arrojaron respuestas diferentes hasta para un total del 72 % de los encuestados, lo que quiere decir que casi nadie repetimos títulos ni autores, ni hay uniformidad en cuanto a los libros importantes.

Nos complace como cervantistas conocer que el libro que más vidas ha cambiado ha sido El Quijote de Miguel de Cervantes, eso sí, no os volváis locos que las respuestas en este sentido han sido 14 de un total de 2.000 encuestados.

No obstante, son un montón si se compara con el libro que obtiene la segunda posición Dime quién soy de Julia Navarro con 6 menciones, La sombra del viento, de Carlos Ruiz Zafón 5 y Caballo de Troya, de J. J. Benítez 4. Vemos que esta pregunta no es nada significativa y que cada persona tiene un libro de cabecera que considera que le ha influido favorablemente en su vida y del que aprendió con su lectura apuntes importantes para el resto de su existencia, por lo tanto, se trata de una opinión totalmente personal. Todos los libros tienen en común que son leídos por millones de lectores.

Tener libros en casa o ver a sus padres leyendo, hizo que el 67 % de los lectores hayan adquirido sus hábitos por alguno de esos motivos o incluso porque sus profesores les motivasen a la lectura. En cambio, cuando los profesores obligan, el índice de lectores por gusto, baja considerablemente.

Algo que no deja de sorprendernos y valoramos mucho es el dominio de los idiomas que ha supuesto un cambio generacional favorable hasta el punto que más del 55% de los jóvenes de 18-27 años lee libros en inglés, frente al 15% de la generación de sus abuelos. No hay sorpresa en cuanto a los motivos por los que se lee ahora menos que hace diez años, quienes así responden lo achacan a que tienen menos tiempo, entre otras cosas porque lo dedican a Instagram, TikTok o YouTube y a ver series y películas (48 %).

En cuanto a los autores españoles preferidos del siglo XXI, aparece Arturo Pérez-Reverte en la primera posición seguido a distancia de otros autores (los que obtienen los grandes premios literarios como el Cervantes o el Nobel se sitúan muy atrás en la lista), entre los que se cuelan Gabriel García Márquez, Isabel Allende, Miguel de Cervantes y… Francisco de Quevedo, con el agravante de que los dos primeros no son españoles y los dos segundos no son de este siglo.

Pero centrándonos en uno de nuestros objetivos fundacionales, el fomento de la lectura de la obra de Cervantes y en especial del Quijote, la Sociedad Cervantina de Alcázar, en sus diez años de vida propone de forma continua acciones que traten de acercar al público y en especial a los jóvenes la literatura cervantina, con todo tipo de actividades de divulgación: rutas cervantinas, conferencias del ciclo Universo Quijote, mesas redondas Cervantinas, todo tipo de publicaciones y artículos o Congresos de carácter Internacional.

Precisamente en el II Congreso celebrado los pasados días 8 y 9 de noviembre, nuestro querido amigo James Iffland, profesor de la Universidad de Boston, intervino con una ponencia titulada: “La mejor novela del mundo que nadie lee: un llamamiento al gremio cervantista”.

https://www.youtube.com/live/ Video de la ponencia (entre los minutos 24:38 y 51:37) wMajCZGmAz8?si=OQKdpu9jX5dJX4Jf

Explicó que no hemos sabido aprovechar el amplísimo conocimiento de la iconosfera (como él la llama) que es toda la iconografía, cuadros, dibujos, comics, etc… creada en torno a los personajes de don Quijote y Sancho Panza. Esta iconosfera es tan grande, que estos dos son reconocidos sin dudar por cualquier persona del mundo y por supuesto de España, aunque no haya leído ni una sola línea de la novela.

En la ponencia reconoce que hay un gremio de cervantistas profesionales que se ven constreñidos por la productividad que se les exige desde sus universidades y que se encuentra muy alejado de los intereses del público en general, que restringen sus actividades a agradar a los burócratas y a agradarse entre ellos mismos dentro de su círculo, intentando decir cosas que nadie antes había dicho sobre la novela, y no piensan en atraer a este grupo de personas a las que les interesaría acercarse al Quijote, pero lo ven como un muro con cierta dificultad.

Propone una campaña para salvar el Quijote creando por parte de los ayuntamientos, bibliotecas, universidades y otras instituciones públicas, pero sobre todo desde asociaciones culturales (como la Sociedad Cervantina) la creación de círculos de lectura en los que todos puedan tomar parte (ya existen en el mundo anglosajón), sobre todo los jóvenes y que se sientan atraídos a formar parte de ellos. Apuntó Iffland que sería deseable que esta iniciativa partiese desde la propia comarca de la Mancha como origen de las aventuras de don Quijote y Sancho Panza, incluso propuso un lema para la campaña: “Quijotízate y léete el Quijote completo con tus amigos, vecinos o compañeros”.

Las asociaciones culturales tenemos que implicarnos en la difusión de estas actividades debiendo esforzarnos en tomar parte activa en el proceso de acercar el Quijote a los jóvenes, con actividades nuevas que les sean atractivas y que les lleguen a través de las redes, donde emplean una porción considerable de su tiempo, ya que son el escaparate que ven y es uno de los pocos lugares en los que podemos mantener su atención el tiempo imprescindible para que conozcan al menos las aventuras más cómicas de la novela y les incite a querer conocer el resto.

En ese sentido, la Sociedad Cervantina de Alcázar recogió el “guante” de James Iffland y se encuentra trabajando en diferentes actividades que pretenden conseguir este objetivo y que se darán a conocer en cuanto estén debidamente perfiladas.

No queremos despedirnos sin animaros a leer algunos párrafos del Quijote y nos viene al pelo recomendaros (este mismo fin de semana en Alcázar se han celebrado las jornadas del guiso de boda de Camacho) que leáis los capítulos 19, 20 y 21 de la segunda parte en los que se cuenta lo sucedido en esta famosa boda y de los que, a la par de ser muy divertidos, se extraen no pocas enseñanzas.

Constantino López Sánchez-Tinajero
Sociedad Cervantina de Alcázar de San Juan

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