El cancionero de Paul Simon "Letras. 1964-2016", obra que, por vez primera, se publica en lengua castellana, constituye un hito en la historia de la música popular estadounidense, y presenta, en edición bilingüe, las letras del afamado cantautor desde su primer álbum en 1964.
A lo largo de su laureada carrera, Paul Simon ha sido distinguido con numerosos honores y recibido otros tantos premios, entre los cuales destacamos sus doce premios Grammy, tres de los cuales (Bridge Over Troubled Water, Still Crazy After All These Years y Graceland) fueron, a su vez, álbumes del año. En 2003 recibió el premio Grammy Lifetime Achievement Award por toda la composición de la música y las letras del dúo Simon and Garfunkel. Ingresó en el Hall of Fame de los compositores y en el del Rock n’ Roll, como miembro de Simon and Garfunkel, y también por su carrera en solitario.
Su canción «Mrs. Robinson», de la película El graduado, figura entre las diez primeras de las 100 canciones más importantes de los primeros 100 años de historia del American Film Institute. Fue galardonado también con el Kennedy Center Honors en 2003 y nombrado una de las «100 personas que dan forma a nuestro mundo» por la revista Time en 2006.
Según refiere el propio Simon a Robert Hilburn en la semblanza que este trazó del bardo, así es uno de los más grandes compositores y cantantes de la música popular occidental del siglo XX: un hombre acomplejado (por su altura), una estrella con amores turbulentos, un ególatra notable, un infatigable compositor de canciones que forman ya parte del patrimonio cultural de la humanidad; además de un consumado bromista incombustible, también icono indisociable de una Nueva York por cuyas añejas e incorruptas esquinas alcanza uno a escuchar las psicofonías de sus melodías; pero es también, entre otras muchas cosas, un docto degustador de ayahuasca. Y es que, a falta de unas buenas memorias o una biografía desautorizada, acaso no haya mejor manera de acercarse a tan poliédrico personaje que través del cancionero que da fe de la magnitud artística de su obra, a fin de descifrar la fascinante personalidad de tan esquivo cantautor, pese a ser uno de los protagonistas de la historia de la música popular, con mayúsculas, de las últimas cinco décadas.
Sería el propio Simon quien sentenciaría el asunto alegando: «¿Para qué necesito una biografía o unas memorias? Mi vida no importa. Son las canciones las que importan». En palabras de Bono: «Te das cuenta de que las grandes canciones nunca se pueden explicar del todo», por lo que, a falta de una buena sesión de ayahuasca con el bueno de Paul, habrá que confirmarse con lo que nos comparte a través de sus indelebles canciones.