Luis García Montero adelantó a los medios de comunicación que “Todo va a mejorar”, la novela de Almudena Grandes que mañana estará en todas las librerías de España, que “esta es la última novela de ella. No tenía nada más escrito. Estaba preparando el sexto volumen de los Episodios de la Guerra Interminable, pero la pandemia hizo que abandonase ese proyecto para centrarse en la que sería su obra póstuma”, dijo García Montero en rueda de prensa.
“Hace dos días, cuando nos llegaron los ejemplares de la novela a casa, nuestra hija Elisa decidió llevarse uno de ellos y ponerlo en su tumba. Yo le dije que desaparecería muy pronto y, efectivamente, al día siguiente ya no estaba, pero habían dejado un ejemplar de Pablo Neruda en su lugar”, cuenta el director del Instituto Cervantes emocionado por el recuerdo.
Según su marido, “Todo va a mejorar es una novela coral que refleja una historia muy cotidiana sobre un futuro próximo que parte de la reflexión de lo que hemos vivido durante la pandemia. Para entender el presente es fundamental recordar el pasado. Y para imaginar el futuro hay que comprender el presente. Almudena siempre ha querido rememorar el pasado de su abuela, que según contaba vio bailar denuda a Josephine Baker; su madre nunca pudo ver una cosa igual porque eran los tiempos de la dictadura. Por eso, ella siempre estuvo muy interesada por ese pasado de libertad”.
Tanto Juan Cerezo como Luis García Montero entienden que “la construcción de los personajes es fundamental para Almudena. Este libro es la esperanza de su propia libertad. La resilencia que todos debemos tener”. García Montero añadió que “las instituciones democráticas están en jaque por todas esas personas que no tienen respeto por ellas. La democracia necesita instituciones y las personas que las desprestigian están haciendo un mal a la democracia”.
El escritor granadino afirmó que “la novela, la dejó inconclusa Almudena, pero me dijo exactamente cómo quería que acabase y cómo tenía que acabarla. Me encargué de redactarla siempre bajo la atenta mirada de Juan. Escribimos un epilogo donde se dice hasta dónde escribió ella y cuáles son los añadidos. Muy pocos por cierto; además, pusimos un glosario de personajes ya que éstos son muy abundantes”.
La novela imagina a una España en un futuro próximo, donde un nuevo partido político llamado Movimiento Ciudadano ¡Soluciones Ya! ha arrasado en las elecciones. Quien lo dirige en la sombra es un empresario de éxito que propugna que el Consejo de Ministros funcione como un consejo de administración, y que tiene proyectos ambiciosos para arreglar el país. Tras la alarma de una ola de vandalismo, formará un nuevo cuerpo de Vigilantes; tras un Gran Apagón creará un acceso limitado a internet, y, ante las dificultades, estimulará la libertad de compras y consumo. Todas ellas serán medidas extraordinarias porque el país se enfrenta a nuevas formas de pandemia que exigen velar, ante todo, por la seguridad. Sólo un grupo de mujeres y hombres corrientes se atreverán a desmontar las mentiras del nuevo régimen en el que todo aparenta mejorar, cuando en realidad se vive bajo los abusos de poderosos sin escrúpulos.
Los malvados para ser buenos malvados tiene que ser simpáticos
Para Juan Cerezo, “la novela tiene varios episodios del futuro que son muy dramáticos. Casi es un thriller donde hay muchas escenas de solidaridad y de lucha contra una posible dictadura. Tiene mucho que ver con la Rusia de Putin y de la China que dice ser comunista, pero es tan capitalista como los países de Occidente”. El líder de este partido es un malvado que quiere quitarse de encima la democracia. “Los malvados para ser buenos malvados tiene que ser simpáticos y este Gran Capitán lo es”, subraya Luis García Montero.
Es pues, “Todo va a mejorar”, una novela coral de anticipación política que tiene lo mejor de Los besos en el pan y la intriga de los resistentes de los Episodios de una Guerra Interminable, la última novela de Almudena Grandes, es sobre todo una galería inolvidable de personajes, que van contando su experiencia de adaptación a un país que ha sufrido fuertes sacudidas y en el que no quieren resignarse. La novela se comenzó a pergeñar a principios de 2020. Fue en junio cuando, tras una revisión, la diagnosticaron el cáncer. “Almudena quiso hacer una historia muy actual, ya sabía lo que la produciría la enfermedad, pese a ello siguió trabajando en la novela”, dijo Luis García Montero.
En la presentación estuvo presente la actriz Aitana Sánchez-Gijón que emocionada leyó un par de pasajes de la novela, también se ha encargado de grabar la versión para el audiolibro. Así mismo, se presentó un video profesional sobre la novela, que puso los pelos de punta a todos los asistentes al acto.
Terminamos con las propias palabras de Almudena Grandes sobre la novela: “Empecé un proceso curioso que no habría podido pasar sino en el confinamiento. En cinco semanas me escribí un moleskine y la mitad de otro. Como no podía andar por las calles de Madrid para pensar, como suelo hacerlo cuando escribo, lo hice por el pasillo de mi casa todas las tardes durante hora y media. Llegó un momento en que no veía las paredes sino lo que tenía en mi cabeza. El 7 de mayo de 2020 la empecé a escribir. Me di ese regalo en el día de mi 60 cumpleaños”.