Pero tampoco nos vamos a rasgar las vestiduras. ¿Cuándo han tenido los gobiernos del mundo buenos gestores? Me dirás que nunca. Pues claro, tío. En realidad, se trata de elegir al menos malo. Y para eso te voy a dar un consejo que no me has pedido, pero aprovéchalo que es gratis. No elijas por ideologías. Ninguna aguanta la distancia corta. A las ideologías les abandona el desodorante y al final apestan. Elige por intuición. Saca tu sexto sentido a pasear que se nos está atrofiando con tanta tecnología chunga 5G.
Por intuición y por eso que el feminismo hegemónico y empoderado llama ampulosamente “sororidad” (la solidaridad de toda la vida) felicito a Isabel Díaz Ayuso, una política honesta y una gestora eficaz por su éxito apabullante al dinamitar el techo de cristal de todos los distritos y barrios de Madrid. Mira, al final he conseguido no mencionar al búnker de Moncloa. Hay epítetos que no se deberían escribir. Pero cuando los que mandan pierden la vergüenza, los que obedecen pierden el respeto.