Se ha demostrado a lo largo y ancho de las civilizaciones que las ideologías no sirven ni pa´tomar por saco. Ser facha, progre, indepe o anarco, solo te sirve si chupas de la teta del Estado. Entonces sí que estás obligado a defender los principios éticos y los valores inalienables de tus ideales. Vale, guay. Y si los niños vinieran de París, sería la bomba, tío.
Lo que defiendo hoy, día de las mujeres (aunque sean princesas) es que Elena y Cristina de Borbón se vacunen y hagan con su vida lo que les salga de donde tú sabes. Es repugnante ver la miseria humana y la mala baba inquisitorial de las tertulias televisivas que debaten la falta de ejemplaridad de las infantas y pasan de puntillas por el salario de funcionaria (que pagamos todos) de la niñera de Irene Montero. O ni mencionan el de la mujer de Pedro Sánchez que es secreto de Estado (sic) Acojonante. ¡Toma ejemplaridad! Si lo que hacen con las Infantas no es un “infanticidio” que baje Dios y lo vea. Bueno, mejor que no baje, que los del portal de transparencia le cobran el viaje. Mira, me ha salido un pareado.