Desde que Henry Lehman, hijo mayor de un comerciante judío de ganado, sale de Baviera en 1844 y llega a EEUU -en busca del sueño americano y una vida mejor-, hasta la caída de Lehman Brothers en 2008, que desencadenó la peor crisis financiera en el mundo de la que aún sufrimos las consecuencias.
Más de 120 personajes desfilan delante de nuestros ojos de la mano de seis músicos-actores, en un fascinante y divertido viaje que narra, a través del humor y del relato, la historia de tres generaciones de la familia Lehman desde su ascenso hasta su caída. Desde que Henry Lehman, hijo mayor de un comerciante judío de ganado sale de Baviera en 1844 y llega a EEUU en busca del sueño americano y una vida mejor, hasta la caída de Lehman Brothers, uno de los mayores bancos de inversión en 2008, que desencadenó la peor crisis financiera en el mundo de la que aún sufrimos sus consecuencias.
El concepto espacial para la obra Lehman Trilogy no pretende ilustrar algo que va implícito en la obra, la construcción, equilibrio, desequilibrio y la destrucción están ya en el texto y no necesitan ser subrayados.
Tengo la intuición de que necesitamos un espacio que sirva como herramienta para contar la historia de una manera determinada, de una manera desenfadada y divertida. Como un cuento, o una balada. Por ello me acerco a un espacio entre Carrusel/ tren de la Bruja/atracción, que puede dar lugar a un lenguaje más cercano al cabaret, al musical o al circo y con ello a un lenguaje brechtiano.
En su disposición en planta el espacio se asemeja completamente a un tren de la bruja, un camino circular que entra por un lado y sale por el otro para volver a entrar de nuevo, un espacio frontal delantero y una fachada incluso de doble altura practicable por los actores, de la que también pueden aparecer elementos o incluso proyectarse encima. Estos cortinajes van cambiando a lo largo de la obra, desde un terciopelo rojo, a una gasa o un cerramiento a tiras por el que los actores pueden pasar.
El camino circular de las vías del trenecito se cambiaría por una pasarela móvil, con la posibilidad de que entren y salgan personajes, elementos o lo que se quiera.
En la primera parte de la Trilogía se empezaría con una estructura, un esqueleto vacío, sobre el que los actores irían colocando elementos, sobre todo carteles. La estética de esta primera parte sería en blanco y negro.
En la primera pausa se acoplarían a la estructura elementos corpóreos nuevos. En la segunda parte ya se pasaría a una estética en colores sepias. En la segunda pausa se construiría el espacio completo, incluso un cartel con Lehman Trilogy y la estética sería a color. Al final de la obra caerían todos los carteles al suelo.
En este tipo de espacios se consigue muy bien crear con poética varios planos temporales a la vez.
El vestuario de Lehman Brothers se ha concebido como una herramienta claramente estética, pero sobre todo como un apoyo a los actores para poder cambiar de personaje. Con 160 años de historia que contar e innumerables personajes que interpretar, éste es el elemento que debe conseguir ayudarles a meterse en tantas pieles y al espectador a comprenderlo.
El concepto es muy fiel a las épocas que representan, con una clara “evolución cromática” que se verá según pasan los años. Desde el departamento de vestuario y caracterización se está configurando un armario tanto de prendas auténticas como confeccionadas por nosotros. Habrá sorpresas, habrá elementos trucados, habrá muchas barbas, bigotes y pelucas y un sinfín de complementos.
El reto no sólo será confeccionar un buen vestuario, sino que los actores puedan efectuar muchos cambios rápidos durante la función. Cada actor tendrá más o menos un atuendo básico desde el que partirá todo lo demás, añadiendo, quitando piezas, cuellos, capas,o intercambiándose ropa entre ellos.
El proceso de diseño está siendo muy meticuloso y estando en contacto con el resto de departamentos para poder lograr el conjunto escénico que necesita este texto para ser contado.
La música en “Lehman Trilogy” sitúa al espectador en el tiempo y el espacio. La composición y la selección de canciones apoya los diferentes momentos históricos, estilos y estéticas.
Los actores-músicos conforman una banda a partir de instrumentos integrados en el escenario: piano, guitarra acústica, guitarra eléctrica, banjo, acordeón, batería, percusión y bajo.
Se han compuesto 4 temas exclusivos para esta obra:
“Freedom” que recuerda los cantos de los esclavos negros de Estados unidos, la canción de trabajo, el gospel. (Compuesta por Litus Ruiz)
“New York” tocada con banjo e inspirada en el swing de raíz que describe la complejidad y variedad de la ciudad a principios del siglo XX. (Compuesta por Litus Ruiz)
“Envejecer” rememora el ragtime de artistas como Scott Joplin a través de una reflexión sobre el paso del tiempo. (Compuesta por Litus Ruiz)
“Ley Seca” es una canción con un toque macarra con percusiones, guitarra acústica y metales hechos con las voces, de la época de la prohibición. (Compuesta por Tamar Novas)
El repertorio se completa con versiones de canciones que refuerzan las escenas y nos ubican a lo largo de los 160 años en los que transcurre la obra. Una obra de teatro con mucha música o un musical muy teatral.
Sala Verde
Duración: 3 horas (2 descansos, incluidos).
Recuerde que una vez iniciada la representación no se podrá acceder a la Sala.
REPARTO
LITUS RUIZ / DAVID P. BAYONAS
PEPE LORENTE / IGNACIO RENGEL
FERRAN GONZÁLEZ
DARÍO PASO / JOSE GIMENO
DANIEL HUARTE
AITOR BELTRÁN / ÓSCAR MARTÍNEZ
REPARTO POR FECHAS
15 DE OCTUBRE
Ignacio Rengel
David P.Bayona
Aitor Beltrán
Dario Paso
Ferran González
Daniel Huarte
16 DE OCTUBRE
Pepe Lorente
Litus Ruiz
Aitor Beltrán
Dario Paso
Ferran González
Daniel Huarte
17 DE OCTUBRE
Pepe Lorente
Litus Ruiz
Aitor Beltrán
Dario Paso
Ferran González
Daniel Huarte
18 DE OCTUBRE
Pepe Lorente
Litus Ruiz
Aitor Beltrán
Dario Paso
Ferran González
Daniel Huarte
Versión y Dirección: Sergio Peris-Mencheta
Escenografía: Curt Allen Wilmer (AAPEE) con estudioDedos
Iluminación: Juan Gómez-Cornejo (A.A.I)
Técnico de iluminación: Marina Palazuelos
Técnicos maquinistas: Manuel Roca y Ricardo Hernández
Vestuario: Elda Noriega (AAPEE)
Vídeo y sonido: Joe Alonso
Dirección musical: Litus Ruiz
Composición musical: Litus Ruiz, Xenia Reguant, Ferrán González, Marta Solaz
Ayudante de dirección: Xenia Reguant
Asesor canto y baile: Óscar Martínez / Xenia Reguant
Ayudante de Ayudante de vestuario: Berta Navas
Dirección Producción y Producción Ejecutiva: Nuria-Cruz Moreno
Ayudante de producción: Blanca Serrano Meana
Auxiliar de producción: Irene García
Director Técnico: Braulio Blanca
Fotografía: Sergio Parra
Diseño gráfico: Eva Ramón
Prensa: María Díaz
Distribución: Fran Ávila
Una producción de Nuria-Cruz Moreno y Sergio Peris-Mencheta para Barco Pirata