El 11 de mayo, se presentó en la librería Tipos infames de Madrid la nueva novela de Julia Montejo, "Violetas para Olivia", novela que encantó a los editores, por lo que decidieron lanzarla al mercado. De momento está siendo todo un éxito y la editorial Mondadori la publicará próximamente en Italia.
La obra la presentó Nacho Alonso, quien no había hablado previamente de la novela con la autora, a quien define como una trapera del tiempo, ya que saca tiempo para escribir y para sumergirse en el periodismo, cine, tele… pese a su ajetreada vida familiar.
El presentador nos sitúa en la escena en la que, si alguien abre un antiguo baúl del ático de la vieja casa familiar, corre el riesgo de descubrir sus orígenes, algo que suele ser negativo, ya que no existe un currículum familiar inmaculado. Así comienza a desencadenarse la trama en
Violetas para Olivia. Sin el pasado no somos nada, pero si excavamos en él podemos caer a la melancolía o quedar atrapados.
Así, en la obra se define la vida familiar como un collar de perlas, en el que todos estamos unidos por la sangre, el amor, el odio… o incluso los secretos, como es el caso de la familia Martínez Durango, familia protagonista de la novela. Además, cuando un collar se rompe es absolutamente imposible recomponerlo.
A su vez, la autora nos plantea una serie de preguntas. ¿Queda la pasión registrada en la herencia genética? ¿Pueden una madre y una hija sentir pasión por el mismo hombre? Como pueden ver en las preguntas, la mujer es el centro de la novela, los hombres son periféricos, sólo destaca uno: el hombre capaz de perderse entre la multitud. En esta familia, ellas dan brillo al apellido y controlan el presente y el futuro, guardan la llave del tiempo. Julia Montejo, en su novela, “empuña la balanza de la justicia” y hace a las mujeres “banqueras del mal” y dice que “somos muy listas y ellos lo saben”, y aunque “ellos inventaron las telenovelas, las canciones románticas, las poesías, ellas siguen tejiendo la vida familiar”.
En la novela confluyen diversos canales narrativos. En primer lugar destaca el periodístico: la autora lo refleja espontáneamente, por ejemplo, al describir el origen vital y las andanzas de la bisabuela (un personaje que no tiene frases pero que hace un reportaje precioso de su vida y sus obras, de cómo viaja del campo castellano a la galanura de los palacios sevillanos, los cuales no abandonará). En segundo lugar, usa permanentemente el cine: ella es guionista y fue directora de Sin retorno (considerada como la mejor película latina independiente). Éste en un rasgo permanente porque la novela está estructurada con flashbacks: se instala a los personajes situando lo que viene detrás de ellos, su propia historia.
El escenario combina feudalismo y modernidad, algo que desgraciadamente era característico incluso en los años 80. A su vez, la obra representa varios parajes incómodos, inexplicables o inquietantes. ¿No han tenido la impresión de haber vivido algo ya? Si fue una sensación agradable, bien, pero si es desagradable y, encima, se vive dos veces, es un suplicio. Y la autora plasma muy bien la sensación de vivir dos veces una misma situación en este libro.
En cuanto a aspectos más abstractos o morales, la autora refleja el concepto de la predeterminación: la causa de todo está en la genética, estamos determinados por nuestro ADN, y esto tiene una gran relevancia en la encrucijada de la vida en la que hay amor, odio, orgullo, pasión, honor… Además, salen a la luz el maltrato y la violencia de género y sexual, algo que está descrito en una página como ese amor enfermo que conduce a la humillación de la esposa, la compañera y la madre. Vamos, que la obra trata de todo menos negocios, salud, religión y política (en el fondo son gente que sabe comportarse en la mesa). Como dato curioso, me gustaría destacar que en este libro no existe la amistad.
¿Por qué leer este libro? En la novela aparecen el odio y el amor, algo que se siente pocas veces en la vida. En la novela queda reflejado el AMOR con mayúsculas, una rareza en nuestros tiempos de decrepitud moral, pero que no es otra cosa que el motor del alma humana.
La novela bucea en las pasiones ciegas que el amor produce, pero no olvida el amor con intereses sociales y económicos o el amor forzado, aunque se centre en el amor que se ofrece en vacío y sin contraprestaciones. Posiblemente, en estos temas se emboscan pasajes de la vida de la autora, según el presentador.
Por tanto, es una obra que hay que leer para sumergirse en el mundo sentimental y pasional de la mujer. La novela es un libro dirigido a los hombres, para que veamos cómo las pasiones y el amor arruinan la vida, aunque no hay vida sin pasión ni amor, como decía el ilustre poeta Juan del Encina: es mejor penar sufriendo dolores que estar sin amores. Es una novela sin hojas vacías que retrata a la mujer a lo largo del siglo XX, en relación con el cambio radical que se ha producido en las relaciones entre hombres y mujeres, una revolución silenciosa a pequeña escala, todo ello desde el punto de vista de mujeres privilegiadas, con libertad de movimientos, pero con poco espíritu gremial. Notransmitían lo que aprendían, generando un círculo vicioso de amargura, algo que ya, afortunadamente, se ha solucionado.
En definitiva, ésta es la obra de una estirpe de mujeres única y excepcional.
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