"Una mujer en Pigalle" de Carlos Suárez es una intriga que recorre el París de las Vanguardias y de la ocupación nazi, hasta casi nuestros días. Un thriller de alto nivel literario que mezcla realidad y ficción con un final que desvela que nada ni nadie son lo que parecen, y en el que los caprichos de la memoria y del olvido juegan un papel muy importante.
En enero de 1941, en plena ocupación alemana, una hermosa mujer es hallada muerta en un humilde apartamento junto a la plaza Pigalle de París. El cadáver cuelga desnudo del techo, atado a las aspas de un ventilador. Nada indica la identidad de la víctima ni el móvil del asesinato. No hay ninguna documentación en la habitación, tan solo un libro y varias cajas de cartón llenas de ropa.
¿Quién era la mujer que ha aparecido muerta de forma tan macabra? ¿Quién ha cometido una atrocidad semejante? Las investigaciones policiales descubren que la víctima respondía al nombre de Rachel Goldwicz, una joven judía de origen polaco que había sido arrestada por prostitución en diversas ocasiones.
A los pocos días de la muerte, detienen a un vecino de la víctima, en cuya casa encuentran lencería de la chica. El caso queda cerrado. Sin embargo, Jérôme Pinault, un joven aprendiz de Policía, sospecha que el hombre acusado del crimen era inocente.
Sesenta años después, la periodista Monique Marais comienza a investigar el caso. A través de sus averiguaciones, iremos descubriendo la breve pero intensa vida de la víctima, huérfana de padre y madre y con una historia de maltrato y abusos a sus espaldas, que al llegar a París logra abrirse paso en el círculo cultural e intelectual de la época. Pablo Picasso, Dora Maar, Man Ray, Lee Miller, André Breton o Paul Éluard son algunos de los personajes que tienen voz en esta novela.
Paralelamente a las investigaciones, van intercalándose textos de Lazare Bracq, un viejo escritor, al que están a punto de conceder el premio Nobel por su escasa pero sublime obra. Lazare padece alzhéimer, por lo que ha olvidado gran parte de su pasado, aunque una imagen recurrente acude a su mente, un recuerdo bajo el que cree intuir la sombra de la culpa.
Así es como, poco a poco, el lector se va acercando a un final imprevisible, que desvela que nada ni nadie son lo que parecen, y en el que los caprichos de la memoria y del olvido juegan un papel muy importante.
Carlos Suárez nació en León en 1961. Licenciado en Ciencias de la Información, ha desarrollado la mayor parte de su actividad profesional como periodista de Televisión Española, donde a lo largo de más de veinticinco años ha sido redactor, editor adjunto y editor del Canal 24 Horas, y jefe adjunto del Área de Sociedad de los Servicios Informativos. Actualmente es editor adjunto de fin de semana en el Canal 24 Horas (TVE). En 2004 su primera novela, La muerte zurda.
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