Ed. Siruela, Madrid, 2023
El hecho de que un escritor se preste a ese arte difícil de la entrevista (en este caso a ser entrevistado) supone no solo un rasgo de generosidad sino también de identidad (a sabiendas, eso sí, de que la habilidad del entrevistador tiene buena parte del protagonismo) por cuanto se 'expone' a que el otro, el lector, conozca y entienda buena parte del fundamento de sus secretos, conozca sus tomas de postura respecto de asuntos ya sea recientes como del pasado y, sobre todo, aporte sugerencias más o menos explícitas donde el atento lector no solo conocerá el fundamento de su arte de escritor, sino de sus dudas y anhelos. Es lo que en el fondo, creo, interesa a quien abre el libro para leer: a ver si ese que habla se parece en algo a mí, o yo a él.