Editorial: La Garúa
Toda obra poética es una mezcolanza de historia universal, experiencia personal, pensamiento, emociones, expresión, creatividad, es decir: un artefacto urdido entre realidad y/o ficción. A todos estos elementos podemos añadir muchos otros, incluso imbricarlos entre ellos, y seguiríamos —arte, mediante— obteniendo un texto lírico. Esta amalgama de ingredientes se da durante el proceso de escritura, ritual en que el poeta encuentra sentido a su vida.