23/08/2017@13:12:49
El silencio de una mirada, la fragilidad de una caricia, el despertar de una nueva sensación a través de la contemplación del cuerpo del otro, o la necesidad más imperiosa de dar salida a la pasión que nos mueve por dentro, sólo son algunas de las múltiples posibilidades del deseo y, que en la película, La seducción, de la directora norteamericana Sofia Coppola, buscan una salida en éstas y otras manifestaciones más ocultas que sólo el deseo sabe mover y articular aunque todas ellas se alejen de la razón.