Cátedra, Madrid, 2017
En buena medida, en este extraordinario libro se nos revela el secreto, que, tratándose de un poeta, no es poco. Un secreto que, paradójicamente, casi no lo es, a saber: nuestro conocimiento de Ausiás March viene, como autor, de una obra de carácter especulativo-meditativa-religiosa, que, acaso, inscribiría su nombre en el terreno de la religión; más he aquí que ahí es donde el posible secreto se desvela –necesariamente, cabría decir- por cuanto en estos lúcidos ‘Dictats’ es él –literariamente- quien ama y conoce y cultiva la palabra, enriqueciendo su discurso más allá de cualquier tema estricto.