También debemos reconocer que han votado a autores que hemos tratado en nuestra revista y lo han hecho con un gusto exquisito. Somos conscientes de que hay novelas que deberían estar en la lista, pero a algunas les ha perjudicado haber sido publicadas en los últimos meses del año, como por ejemplo las de los escritores: Marta Sanz, Pilar Adón o Miguel Ángel Hernández, que han pasado casi desapercibidas para nuestros votantes. A otras les ha perjudicado publicarse a principios de año y aquí el olvido ha jugado alguna mala pasada.
Por eso ofrecemos nuestras disculpas a aquellos escritores que se merecían estar. Quizá el año que viene aumentemos la lista hasta una cifra considerablemente mayor para que quepan todos los que se merecen estar. Aun así, creemos que ha quedado muy equilibrada y se ha hecho justicia a muchos escritores que se han ganado estar en ella.
La mejor novela del año ha sido en nuestra opinión “Contra la juventud” de Pablo d´Ors. Una novela sencillamente estupenda, de una gran calidad literaria y de una sensibilidad prodigiosa. Heredero de autores centroeuropeos, como Kafka que nos trajo la modernidad a la literatura, Pablo d´Órs ha explorado su yo desde distintas perspectivas sin olvidarse de que reírse de uno mismo es la forma de madurar desde esa juventud que todos hemos padecido.
Le sigue de cerca en la clasificación “La puerta pintada” de Carlos Aurensanz. Después de tres fascinantes novelas históricas, Aurensanz realiza con este libro una incursión en el mundo del suspense, construyendo un thriller histórico que ahonda en los móviles psicológicos de un asesino en serie, para traernos una historia emotiva y llena de recovecos, que atrapa desde el principio hasta el final. Por un estilo impecable y una historia a la vez interesantísima, brutal y conmovedora, “La puerta pintada” ocupa un merecido segundo puesto en la clasificación de este año.
Juan Gómez-Jurado repite en nuestra clasificación por tercera vez, lo cual ya dice bastante de la calidad de sus novelas. Esta vez su novela ocupa la tercera posición. “Cicatriz” es una historia absolutamente adictiva que nos demuestra por qué Gómez-Jurado es el autor español de thriller más leído en todo el mundo. La novela empieza muy fuerte, haciendo que a las pocas líneas ya no podamos dejarla y que la narración nos atrape por completo, llegando a hacernos sudar, sin darnos un momento de tregua. A lo que hay que añadir que “Cicatriz” en ningún momento baja el ritmo ni la calidad.
Desde México nos llega “El murmullo de las abejas” de Sofía Segovia que se ha hecho con la cuarta posición. Esta es una de esas novelas mágicas donde la realidad se topa con lo enigmático. Las historias que le contaba su abuela cuando era niña han dado una novela rompedora que tiene unos personajes maravillosos y una trama que engancha al lector desde el comienzo del libro. Podemos decir que su historia es absolutamente brillante y resplandece por méritos propios.
“Expo 58” de Jonathan Coe es un libro en el que el ingenio, el drama y la comedia se dan la mano para transportarnos a un lugar en el que se produce uno de los choques de culturas más interesantes del pasado siglo: la Exposición Universal de Bruselas en 1958. Con un estilo en unas ocasiones plácido y en otras, vertiginoso, Coe ha apostado fuerte por esta novela y consigue superar nuestras expectativas y resaltar de la media sin dificultad. “Expo 58” es una estupenda muestra del mejor humor británico, pero también una certera reflexión sobre el engaño y las oportunidades perdidas, lo que le ha valido un gran quinto puesto.
La sexta posición ha sido para “Lo que tengo que contarte” de Julia Montejo. La historia de unos balleneros vascos que viajan hasta las costas de Islandia en el siglo XVII le da a Julia pie para escribir sobre la diferencia de las personas entre aquel siglo y el nuestro. Sus personajes son muy vivos y llenos de secretos, huye de los protagonistas que se sienten víctimas y de lo que no huye es de la condición femenina, cómo vivían las mujeres en aquellos tiempos es una de las motivaciones de su libro que no pierde el ritmo en ningún momento y entretiene, que es lo que le gusta a ella hacer.
De “La balada de Sam” ya dijimos en su día que “las primeras setenta u ochenta páginas de la novela se encuentran entre lo mejor que he leído en todo el año”. Esas palabras las decíamos en junio y ahora, seis meses después, las mantenemos. Javier Márquez inicia una novela de un modo desenfrenado a la vez que brillante para relatarnos la historia de un escritor que va en busca de la verdad de quién era realmente su padre y debe construir sus recuerdos de nuevo a una edad algo avanzada. Una trama fuerte y absorbente, junto con un estilo de gran calidad, han hecho que “La balada de Sam” ocupe la séptima posición.
La octava posición ha sido para “La lengua de los secretos” del escritor vasco debutante Martin Abrisketa. Un escritor intimista y subyugante que ha creado una historia donde pone al descubierto sus sentimientos hacia su padre contando la rocambolesca historia que padecieron durante y después de la Guerra Civil Española, él y sus tres hermanos, que partieron de Euskadi rumbo a Tenay para salvar sus vidas. Un debut que no puede ser más prometedor.
“El sueño de Ares” de Rafael Narbona se ha alzado con la novena posición. Es un libro formado por una serie de relatos independientes, centrados en la temática de la guerra y del odio entre los seres humanos, que consiguen formar un extraordinario collage en el que se muestran las consecuencias de la violencia y la animadversión entre los hombres. Son quince relatos en un panorama de violencia y destrucción en el que toman la voz tanto víctimas como verdugos. El crimen urbano, la mafia, las reyertas entre los hooligans, la guerra civil española, la caída del muro de Berlín o la defensa de Stalingrado son algunos de los temas que aparecen en “El sueño de Ares” y mediante estos episodios Rafael Narbona consigue reflejar el porqué de toda esta destrucción con la que el dios de la guerra sueña y de la que los hombres aún no hemos conseguido despertar ni escapar.
Después de la sorpresa que nos ha traído el libro anterior, nos encontramos cerrando la lista a “Hotel Mediterráneo” de Alejandro Pedregosa. Con esta novela, el escritor ha cambiado su registro narrativo y nos ha bridado una novela muy actual sobre el tema de la violencia de género. A ritmo de las canciones de Joan Manuel Serrat nos va describiendo una historia en que lo que parece, no lo es. Con escritura clara, va poniendo el dedo en las muchas llagas de la sociedad actual y todo con una exquisita calidez y calidad.
Les podemos asegurar que las novelas aquí descritas son absolutamente imprescindibles para componer el panorama literario de nuestro país y de lectura obligada. Unidas a las listas de novela histórica y novela negra conforman lo más granado de la literatura de este año que ya agoniza. Esperemos que el 2016 nos traiga tan buena literatura como este año.
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