En el verano de su último año en el instituto, un 4 de julio en Duluth, Laura (la hermana mayor de Cindy, pareja del detective Jonathan Stride) fue salvajemente asesinada. La policía sospechó de un vagabundo, pero no hubo ningún arresto y el caso se cerró. Ahora, treinta años después, la mejor amiga de Laura, Tish Verdure, vuelve a Duluth para escribir un libro sobre la muerte de la joven, y descubre nuevas pruebas que ponen en duda la versión oficial de los hechos. Pero Tish también guarda secretos que se obstina en ocultar. Cuando una chica aparece ahogada en el río Saint Louis y un testigo del crimen de Laura se intenta suicidar, Stride comprende que la violencia del pasado está salpicando el presente.
Caso abierto es una genial novela negra que trata sobre la resolución de un crimen cuya investigación lleva estancada casi treinta años, hasta que la llegada de una mujer interesada en escribir una novela sobre ese homicidio consigue reabrir viejas heridas y que el caso sea retomado con un renovado interés.
La trama que Brian Freeman construye en esta novela se caracteriza por una angustiosa y opresiva atmósfera y por un argumento en el que la intriga consigue no rebajar su nivel en ninguna ocasión en las casi cuatrocientas páginas que tiene esta novela. El misterio es fundamental, siempre en su justa medida, y los giros de la trama son un elemento añadido que dota de gran fuerza al argumento de esta novela y nos hace esperar con ansia el desarrollo de los acontecimientos, nos hace desear con urgencia saber qué viene después.
Por otro lado, Brian Freeman sigue la dinámica habitual en él con sus personajes. Así que todos ellos vuelven a ser personas de gran complejidad y de interesante evolución según los puntos álgidos de la novela van dejando su huella en ellos. En Caso abierto, esta evolución tiene un especial punto de interés debido al gran lapso de tiempo que separa los hechos actuales del momento en el que se cometió el crimen. Y además, esto nos enseña cómo el pasado puede llegar a ser un juego muy peligroso ya que uno puede descubrir cosas que no querría saber sobre los implicados, incluso sobre aquellos a los que ha amado o respetado durante años.
En definitiva, Caso abierto es una novela con una gran trama, investigación, ambientación y personajes que demuestra por qué Brian Freeman ha llegado al lugar que ocupa actualmente en el mundo del thriller.
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