En democracia, la transparencia es una responsabilidad de los poderes públicos, no de los ciudadanos. Sin embargo, los últimos años han revelado una persistente obsesión por parte de los gobiernos de controlar la intimidad de las personas en el nombre del orden, la seguridad nacional, la lucha contra el terrorismo y la prosperidad económica. En las esferas de poder, la oscuridad produce monstruos que ya conocemos: tortura, ejecuciones sumarias, asesinatos, encarcelamientos injustificados, corrupción. Los crímenes quedan impunes mientras que aquellos que los denuncian son perseguidos, encarcelados o asesinados. En tiempos de fascismo, todos somos disidentes. Nuestras trincheras están en la Red.
Bradley Manning es un soldado raso que no quiso aceptar los crímenes de guerra como daños colaterales. Julian Assange es un informático que ha decidido hacer un trabajo que los grandes periódicos han abandonado. Edward Snowden es un técnico informático que, ante la evidencia de un asalto contra los derechos de sus conciudadanos, decidió denunciar. Los tres son ciudadanos ordinarios que, enfrentados a circunstancias extraordinarias, decidieron cumplir con su deber de ciudadanos.
Las consecuencias para ellos no podrían ser más graves ni más reveladoras: uno pasará los siguientes 60 años de su vida en la cárcel por delitos de traición, el segundo lleva un año encerrado en la embajada de Venezuela y se enfrenta a un extraño cargo de violación consensuada. El tercero se ha convertido en una de los más buscados por el servicio de inteligencia estadounidense. Los tres son víctimas de una campaña internacional de descrédito personal cuya intención es defraudar a los espectadores y convencerles de que lo importante son las apariencias y no los hechos. En cada oficina hay cientos de ciudadanos como ellos. Por sus manos pasan documentos extraordinarios, algunos de los cuales necesitan salir a la luz.
Marta Peirano escribe sobre cultura, tecnología, arte digital y software libre para diarios y revistas. Fue jefa de cultura en el difunto ADN.es y sus blogs La Petite Claudine y Elástico.net han recibido múltiples premios y han figurado entre los más leídos e influyentes de la blogosfera española. Ha co-dirigido los festivales COPYFIGHT sobre modelos alternativos de Propiedad Intelectual y es la fundadora de la HackHackers Berlín y Cryptoparty Berlin.
Ha publicado varios libros: El Rival de Prometeo, una antología editada sobre autómatas e Inteligencia Artificial; dos ensayos colectivos (Collaborative Futures y On Turtles & Dragons (& the dangerous quest for a media art notation system) y The Cryptoparty Handbook, un manual para mantener la intimidad y proteger las comunicaciones en el Cyberespacio.
Desde septiembre de 2013 dirige la sección de cultura de eldiario.es.
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