Hay muchas cosas que Ettore Benussi, comisario de la brigada de Trieste a punto de jubilarse, no puede soportar: los chavales que no sueltan el móvil, los edificios de los años 60 que deterioran el urbanismo triestino, el novio de su hija e, incluso, su prominente barriga (de hecho, acaba de empezar una dieta seera). Tampoco tolera los casos complicados y, menos aún, a esos dos inspectores jóvenes tan idealistas que trabajan con él: Valerio Gargiulo, y Electra Morin. Por eso, Benussi prefiere retirarse y escribir, entre un sorbo y otro de grappa, la historia de un comisario que se parece a Montalbano.
Pero la muerte de la vieja Ursula Cohen interfiere en su tranquilidad. El caso, que apasiona a sus dos subalternos, se presenta confuso: la mujer resbaló y se ahogó. Pero, ¿qué hacía una señora de noventa años caminando por la orilla en una noche de viento?...
Roberta de Falco (Milán, 1951) es el pseudónimo de Roberta Mazzoni, una señora de cabello blanco que tras muchos años dedicada a la escritura, especialmente como guionista de cine, ha decidido lanzarse a la narrativa y darse a conocer. Nadie es inocente es su primera novela, y ya está trabajando en el segundo caso del comisario Benussi. Vive a caballo entre Roma y Trieste.
Tras
Nadie es inocente (2013), ha publicado ya tres novelas más de la serie del inspector Benussi : Benussi e la sileziosa Ada, Bei tempi per fente cattiva y Il tempo non cancella, todas en 2014. Ha sido traducida al inglés y al francés.
La autora visitará Barcelona gracias a BCNegra. En el marco de esta semana, participará en una mesa redonda sobre « Tres propuestas negrocriminales italianas » junto con Donato Carrisi y Antonio Manzini. El moderador será Maurizio Pisu. Será el miércoles, 4 de febrero, a las 17 horas en el Auditorio del Conservatori del Liceu (C/ Nou de la Rambla, 88
Puedes comprar el libro en: