Justo antes del amanecer, en una decadente ciudad americana, cientos de parados esperan la apertura de la oficina de empleo para reclamar uno de los mil puestos de trabajo que se han anunciado. Han hecho cola durante toda la noche.
Invisible hasta que lo ven encima de ellos, un Mercedes surge de la fía niebla de la madrugada. Su conductor atropella y aplasta a los que encuentra a su alcance. Después da marcha atrás y vuelve a arremeter contra ellos. El asesino huye dejando atrás ocho muertos y quince heridos.
Meses después, un policía jubilado, Bill Hodges, sigue obsesionado con este caso sin resolver, cuando recibe la carta de un anónimo que se declara culpable de la masacre. Mientras tanto, Brady Hartfield vive con su madre alcohólica en la casa donde nació. Disfrutó tanto de aquella sensación de muerte debajo de los neumáticos del Mercedes, que quiere recuperarla.
Mr Mercedes es una novela con la que
Stephen King vuelve a sorprender, ya que ha adoptado un estilo de trama que nunca antes había utilizado, pero protagonizada por esos personajes extremadamente complejos y espectaculares que tan bien se le da crear.
La novela nos presenta en sus inicios al personaje de Bill Hodges como un inspector jubilado que cada día duda si pegarse un tiro o no con la vieja pistola de su padre y acabar con el gran vacío en el que se ha convertido su vida desde que se jubiló, pese a que no ha perdido ninguna de las aptitudes que le hicieron ser un excelente policía, entre las que se encuentran su don de gentes, sus capacidades deductivas y su habilidad de aprovechar hasta el mínimo error de sus enemigos en su favor, siempre presentes y a la vez sutilmente ocultas en cada momento
Por otro lado, el asesino del Mercedes, Brady Hartsfield, es un hombre profundamente perturbado y tan minuciosamente construido que de él se podría sacar material que daría para medio compendio de psiquiatría ya que abarca desde traumas de la infancia hasta ideas psicóticas, pasando por rasgos de trastornos de la personalidad antisociales, histriónicos y obsesivo compulsivos. Es un personaje tan bien construido que se le acaba apreciando bastante pese a las atrocidades que comete y a que queramos verle muerto.
La combinación de estos dos grandes personajes (junto con otros más que tampoco son nada desdeñables) con una trama llena de misterio, suspense y, cómo no, terror, fundamentalmente psicológico, genera un cóctel explosivo que disfrutarán de la primera a la última página. Además, hay ciertas escenas de Mr Mercedes que son absolutamente impactantes y que muchos no olvidaremos fácilmente dada la calidad de las mismas.
En definitiva,
Stephen King nos presenta en
Mr Mercedes una sensacional obra de suspense en la que relata un despiadado juego entre el ratón y el gato en el cual realiza un retrato certero de la mente de un asesino obsesionado y demente.
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