Bajo la alfombra de lo que podría pensarse que es un género ya agotado, el intercambio epistolar como uno de los marcos narrativos, se esconde igual aquella imaginación volátil, casi cercana al delirio, que ha poblado el alma de muchos venezolanos, desde sus libertadores y sus déspotas megalómanos hasta sus artistas, sus reconocidos arquitectos y sus migrantes de todos los estratos. El hilo narrativo de esta novela nos tira de la mano, desde los tiempos de Salazar, hasta Weston, Florida, pasando por la Cuba de Fidel, el barrio San Bernardino de la judería caraqueña y los vaivenes políticos de ese país caribeño condenado a florecer en una encrucijada de la geopolítica; añorado por su diáspora y por los apetitos de imperios diversos.
Antonio y Carlota son una pareja que encarna el dilema del migrante: huir de un pasado incierto para aterrizar en un presente igual de inestable. Antonio, portugués que dejó atrás la dictadura, y Carlota, venezolana que ve su país sacudido por la guerrilla urbana, intentan levantar una familia mientras las balas atraviesan su cotidianidad. Caracas, a principios de los 60, es descrita como una ciudad insegura. La lucha entre las fuerzas del Estado y grupos subversivos convertía cualquier barrio en una trinchera.
Recorremos los años 1962-1964, un período en el que la democracia venezolana recién nacida se enfrentaba a sus primeras amenazas. La guerrilla respaldada por La Habana, los restos de la Seguridad Nacional de la dictadura perezjimenista y una población atrapada en el medio, obligada a elegir bandos o simplemente a sobrevivir. Antonio y Carlota encuentran un refugio en un penthouse entre las esquinas de Paradero y Venus, con vista al cerro Ávila. Pero el respiro dura poco: la presencia de un vecino vinculado al servicio secreto los pone bajo la lupa, y la violencia vuelve a llamar a su puerta. Aunque intentan vivir con normalidad, la realidad no tarda en alcanzarlos.
“La cocina sigue ahumada por el incendio del día del tiroteo”, “un árbol de Navidad en medio de un apartamento con agujeros de bala en las paredes” son imágenes que reflejan el intento de los personajes por crear una rutina frente al caos. No obstante, a medida que avanza el relato, esa tarea se ve menguada. Refugiarse y desconectarse de la violencia a su alrededor, con la guerra presente, les impide escapar de la brutalidad de su contexto.
Dividida en pequeños capítulos fechados, De Paradero a Venus se alimenta de cartas cruzadas entre Venezuela y Portugal, mensajes que describen con angustia la realidad de un país en tensión. “Al parecer Venezuela también era un sitio peligroso, políticamente inestable. Por las cartas de María a sus padres —una de las hermanas de Antonio que vivía también en Caracas— se dejaba entrever que sus hijos estaban en un sitio mucho más peligroso que donde salieron, pues la vida en Quinta Grande era apacible e idílica”.
Antes, Gonçalves Romero hace un alto en la vorágine del conflicto para recordar los orígenes de Caracas: diseñada siguiendo los cánones de las Leyes de Indias, la ciudad colonial tenía un aire mediterráneo, a pesar de su proximidad al mar Caribe. Con el tiempo, el crecimiento urbano trajo consigo túneles y autopistas que eliminaron muchas de sus limitaciones estructurales. Se vencieron barreras naturales, se unieron valles y se canalizó agua desde ríos lejanos, permitiendo que la urbe creciera hacia arriba, transformándose en la metáfora perfecta de la adaptabilidad y el desafío permanente de sus habitantes.
Más allá de la violencia y los entresijos políticos y económicos, imprime en sus páginas una radiografía de las clases sociales. A través de los personajes y sus interacciones, se expone el racismo y el clasismo latente en la sociedad. Frases como: “Si siguen así, un día va a llegar uno de los guajiros a la política y nos va a sacar a todos. ¡Populismo! ¡He dicho!” resuenan con una actualidad inquietante, mostrando los temores de una clase privilegiada que percibe cualquier cambio como una amenaza.
En De Paradero a Venus hay una profunda documentación sobre hechos históricos que marcan los hitos de la historia de Venezuela. El autor presenta estos eventos con una claridad que invita al lector a construir, por sí mismo, un panorama de la realidad. La habilidad para contextualizar esos hechos dentro de la trama, sin imponer conclusiones, es una de las grandes virtudes de la novela. Los episodios no se presentan como un bloque rígido, sino como una serie de piezas que el lector puede ensamblar según su interpretación, contribuyendo así a una comprensión más compleja.
Con sus motivaciones, creencias y opiniones, los personajes son el vehículo perfecto para narrar una historia que no pierde de vista la dimensión humana: la novela pone en primer plano las experiencias personales de los individuos que viven bajo la sombra de esos hechos trascendentales. Es un trabajo que no se limita a explicar el contexto político y social, sino que lo lleva a un plano cercano, reflejando cómo la gran política puede invadir la intimidad de un hogar, transformando la vida cotidiana de maneras profundas.
También aborda la división histórica entre la derecha y la izquierda en Venezuela, un país que, en su momento, fue percibido como un faro progresista en América Latina. Durante años, muchos vieron a Venezuela como uno de los pocos lugares “donde el futuro parecía estar al alcance de la mano”, un lugar donde las promesas de bienestar y modernidad se materializaban con rapidez. Sin embargo, a medida que avanza la trama, queda claro que ese futuro tan ansiado se desvanece, Lo que inicialmente se presentaba como una tierra de oportunidades y esperanza se transforma en un escenario donde las promesas se pierden en la confusión de la política y la desilusión.
Ilustra cómo ese progreso se fue apagando con el tiempo, y cómo los personajes, atrapados en sus propias luchas personales y políticas, se enfrentan a una realidad mucho más compleja y oscura. Tiene en su haber la audacia de tratar temas complejos, semi olvidados y un tanto tabú dentro de las constricciones de una novela que no aspira a trascender la sencillez de esa ficción que se deja leer en las esperas de los aeropuertos.
Con este enfoque, De Paradero a Venus se convierte en una contribución a la memoria colectiva del país. Una suerte de retrato intimista que muestra la gran política desde la óptica de un hogar bajo asedio.Un testimonio de cómo la Historia define la vida cotidiana, y de cómo, a veces, encontrar refugio no es sinónimo de encontrar paz.
No olvidemos que Antonio y Carlota residieron antes en la urbanización Simón Rodríguez, “un refugio para guerrilleros” tras la caída de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, “por su complejidad estructural y la composición de sus habitantes, principalmente estudiantes de la Universidad Central de Venezuela”. En un contexto donde la Revolución se veía como la única esperanza para el bienestar de Latinoamérica, el gobierno declaró la guerra a los subversivos, se alió con Estados Unidos y recibió ayuda económica y militar. Este clima de violencia golpeó tanto a los personajes, que, al sentirse atrapados, decidieron mudarse a un penthouse entre las esquinas de Paradero y Venus. Sin embargo, al llegar allí descubrieron que el conflicto continuaba, pues la zona se convirtió en un epicentro de enfrentamientos.
Lo que sobresale en la narrativa de Gonçalves Romero es su habilidad para captar con precisión la fragilidad y la incertidumbre que han acompañado a generaciones de venezolanos, y que, cincuenta años después, sigue presente. El apéndice final refuerza esta sensación: familias desmembradas, dispersas por el mundo, repitiendo una historia que parece cíclica.
Una metáfora profunda sobre el impulso de huir, de esconderse de los conflictos sociales: dondequiera que estemos, ahí estarán, manifestándose de mil maneras, como movimientos tectónicos sobre un núcleo líquido y tumultuoso que no cesará su irradiación destructiva hasta que desaparezca la injusticia de origen que lo provoca.
Ficha técnica:
Título: De Paradero a Venus
Autor: Jorge Humberto Gonçalves Romero
Género: Narrativa
Año de publicación: 2024
Páginas: 278 páginas
Editor: Círculo Rojo
ISBN: 9788410735514
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